El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, aseguró hoy que "son imposibles de tolerar las idas y vueltas" del macrismo en la discusión por el traspaso de mando y vaticinó que a Mauricio Macri y Gabriela Michetti, la fórmula electa, "la Historia los va a maltratar" por este "sainete", al tiempo que negó enfáticamente que la presidenta Cristina Fernández esté "golpeada" por la situación.
El funcionario cuestionó la cautelar presentada por Cambiemos para que la Presidenta cese su gobierno desde el primer minuto del 10 de diciembre y advirtió que "no tiene ni pies ni cabeza" el dictamen en tal sentido del fiscal Jorge Di Lello.
En su última conferencia de prensa como jefe de Gabinete, Aníbal Fernández ratificó que la mandataria, por esta razón, "decidió no ir" al Congreso para la ceremonia de mañana: "Si el objetivo es que no esté, por qué va a ir, además está en riesgo su ", planteó.
"íCómo va a estar golpeada por esto! ¿La Presidenta que ha torcido la historia de los argentinos para bien?", sostuvo el funcionario.
"¿Se va a poner mal porque no puede estar en las asunción? ¿Pero qué tiene que ver?", indagó y se quejó que desde el macrismo "han hecho cualquier cosa para que la Presidenta no está presente" en la asunción de Macri. "Las idas y vueltas que se han exhibido son imposibles de tolerar", prosiguió el funcionario, quien planteó que "la discusión no es política, sino de una imagen" de traspaso, que se buscaría evitar.
Además, fustigó que "para culminar el sainete, se presenta una medida cautelar, firmada por el presidente y la vicepresidenta electa; una cosa que la Historia de los argentinos, va a maltratar". El jefe de Gabinete los criticó por, a su criterio, "pretender cambiar en horas la forma de la entrega del mando" y apuntó que "no existió nunca conflicto en la historia del país", por este tema.
"Y para colmo un fiscal (Di Lello) que mete la cuchara donde no tiene que meterla, diciendo que el mandato termina el 9, a las 12 de la noche, lo que no tiene pies ni cabeza. Si así fuera, nos hubiéramos quedado sin presidente durante 12 años", razonó.
Sobre ello, opinó que "esto termina denuncia contra denuncia, así que la Presidenta tomó la decisión de no concurrir" e insistió en que "este es un tema no opinable para la Justicia", sobre el traspaso.
"Es Presidenta hasta que se transfiere el mando, nunca sería ex presidenta", insistió el funcionario, para recalcar que "si el objetivo es que no esté, que no exista la imagen, para qué va a ir la Presidenta. Han hecho cualquier cosa para que la Presidenta no esté".
En esa línea, remarcó que "el traspaso en la Casa Rosada no tiene ninguna razón de ser, ¿dónde dice que debe ser en la Casa Rosada?", para afirmar que "claro que sí" estaría garantizada la paz social.
