Despenalización del aborto: ¿cuándo lo votará el Senado?
Tras una sesión maratónica, la Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto de despenalización del Aborto. Ahora la iniciativa pasará al Senado para su discusión.
De acuerdo al artículo 78 de la Constitución Nacional (CN), «aprobado un proyecto de ley por la cámara de origen, pasa para su discusión a la otra cámara». De esta forma, el presidente de la Cámara Baja, Emilio Monzó, deberá informar al Senado sobre la sanción.
Una vez en la Cámara Alta, deberá pasar una semana antes de que el proyecto con media sanción tome estado parlamentario.
Formalmente, el Senado podría darle tratamiento exprés a la iniciativa y discutirlo dentro de los ocho días de su ingreso. Sin embargo, es improbable que esto suceda.
Teniendo en cuenta que Diputados la debatió en comisión durante dos meses y medio en los que se escuchó a 723 exposiciones, es de esperar que el proyecto también sea analizado con detenimiento por los senadores por lo que los especialistas coinciden en que el proyecto podría llegar a tratarse en el recinto recién en septiembre.
El Senado por el aborto
Qué pasara si el proyecto del aborto se aprueba en el Senado o si la cámara lo rechaza.
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Si el Senado rechaza el proyecto en su totalidad
En este caso se aplicaría lo establecido por el artículo 81, que dispone que «ningún proyecto de ley desechado totalmente por una de las Cámaras podrá repetirse en las sesiones de aquel año».
Por ello, el proyecto no puede volver a tratarse hasta el ejercicio siguiente. La discrepancia total de una de las cámaras significa la «falta de voluntad para integrar el acto complejo de la sanción».
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Si el Senado introduce modificaciones al proyecto
La CN establece que «ninguna de las Cámaras puede desechar totalmente un proyecto que hubiera tenido origen en ella y luego hubiese sido adicionado o enmendado por la Cámara revisora».
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En este caso, el proyecto vuelve a la cámara de origen que podrá, por mayoría absoluta de los presentes, aprobar el proyecto con las modificaciones o insistir en la redacción originaria, a menos que las adiciones o correcciones las haya realizado la revisora por dos terceras partes de los presentes.
En este último caso, el proyecto pasará al Poder Ejecutivo con las adiciones o correcciones de la Cámara revisora, salvo que la Cámara de origen insista en su redacción originaria con el voto de las dos terceras partes de los presentes.
La Cámara de origen no podrá introducir nuevas adiciones o correcciones a las realizadas por la Cámara revisora.
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Si el Senado aprueba el proyecto
Se convierte en ley pero debe ser reglamentado por el Poder Ejecutivo.
En ese caso, existe el instrumento del veto que permite al Presidente rechazar total o parcialmente lo aprobado por el Congreso. Mauricio Macri anticipó que respetaría la decisión de los legisladores aunque usó el veto con la ley de Tarifas.
