Quilmes: el abandono de obras por falta de inversión perjudica a los vecinos y comerciantes
La vida de los vecinos y comerciantes de Ezpeleta se encuentra paralizada tanto la actividad comercial como circulación vial y peatonal por el abandono de la obra en la avenida José Hernandez hasta Lugones, en esa ciudad de Quilmes.
Entre los puntos críticos que plantearon al Gobierno Municipal, conducido por Martiniano Molina, está la terminación de veredas sin pendiente pronunciada para evitar la caída de transeúntes, en especial de adultos mayores y la colocación de refugios para paradas de colectivos.
“Hay paradas de colectivos que concentran un gran número de pasajeros. Lamentablemente se instalaron refugios de 1 metro cuadrado y en otros casos todavía no se colocó nada. Solicitamos que piensen en los vecinos que esperan el colectivo en días de mal tiempo o con altas temperaturas, teniendo en cuenta que se sacaron todos los árboles que había en la avenida”,
explicó Pablo Moreno, uno de los vecinos.
Más reclamos contra el Gobierno de Martiniano Molina
La construcción del cruce de la calle Juan Cruz Varela, fue otro de los reclamos. Esa calle se destaca en el barrio por el alto tránsito de jóvenes, chicos y padres que van a diario al colegio Pacelli. También circulan autos y camiones que se dirigen al paso bajo nivel de las vías de José Hernandez.
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“Nos resultó una explicación muy insuficiente que los responsables de obras públicas de Quilmes argumenten que Vialidad Provincial reconoce a la avenida Mitre como ruta provincial y por eso no habilitaron el corte del boulevar que divide la calzada en esa calle tan transitada”, dijo otro vecino, Francisco Svrznjak.
La explicación que dieron es que el municipio se ocupará más adelante de abrir el paso de Juan Cruz Varela y de otros detalles de reordenamiento vial.
“Esa respuesta significa que en unos meses van a volver a cerrar la avenida Mitre para romper y construir ese cruce, resulta absurdo porque implica un gasto extra en obra pública que se puede evitar si se hace ahora”,
reclamó el vecino.
El otro reclamo vecinal fue por el bacheo de todas las calles destruidas a partir del cierre de avenida Mitre. El cambio en la circulación de colectivos, camiones y autos por distintas calles del barrio afectó la zona y la comunidad teme que una vez completada la obra el municipio postergue repararlas. Se trata en particular de las calles Pringles, General Paz, Dorrego al fondo, al igual que José Hernandez y Juan Cruz Varela, que presentan roturas muy críticas del pavimento y se exigió el bacheo de manera inmediata.
Por último los comerciantes de esa parte tan demorada del ensanchamiento de avenida Mitre se vieron seriamente perjudicados durante estos meses. Algunos tuvieron que bajar sus persianas, otros persistieron aunque los afectó la crisis económica y el impacto negativo en sus ventas por la disminución del tránsito de autos y personas debido a calles cortadas y veredas rotas.
Sin embargo, los funcionarios municipales descartaron el pedido de eximición de tasas ya que debería ser aprobado por el Concejo Deliberante y se extendería a otras zonas con obras de pavimentación similares, lo cual sería insostenible.
