En el primer trimestre de 2019, el consumo de carne vacuna fue el más bajo de los últimos años
La alta inflación y el menor poder adquisitivo de la población derivó en un histórico descenso del consumo de carne vacuna. Según los datos del primer trimestre de este año, que fueron elaborados por la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (CICCRA), el consumo fue de 49,6 kilos per cápita, registrando una caída interanual del 13,5% y transformándose en el más bajo de los últimos 50 años.
En lo que va del gobierno de Mauricio Macri, el Índice de Precios al Consumidor aumentó un 185,7%, mientras que los salarios solo crecieron en dicho lapso un 138,2%, hecho que, según CICCRA, justifica «una disminución del poder de compra de los salarios de un 16,6%».
Ante un menor poder adquisitivo, la población busca proteína animal en otros cortes. Desde diciembre de 2015 y marzo pasado, los precios de la carne vacuna aumentaron un 134,1%, la de pollo un 154,6% y los cortes de cerdo un 126,8%. Todo esto representa que el poder de compra de los salarios le ganó a la carne vacuna y al cerdo, y perdió casi un 7% frente al pollo.
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Por otro lado, en marzo la participación de las hembras en la faena (vacas que podrían ser empleadas como reproductoras) volvió a subir a 48,9% del total, superando el guarismo de marzo de 2010 en 0,7 puntos porcentuales y quedando apenas a 0,3 puntos porcentuales por debajo del récord para marzo registrado en 2009.
Para CICCRA, este resultado «solo es comparable con los registros del primer trimestre del 2008 y también del 2009, período durante el cual el sector ganadero argentino transitó la peor fase de liquidación de hembras de las últimas décadas».
Los especialistas de la entidad sostienen que la mayor presencia de hembras en la faena puede ser atribuido a «la creciente demanda china de carne vacuna, ya que representa más de 60% del total exportado desde Argentina, y en segundo lugar el elevadísimo costo del dinero, producto de la política económica en marcha, lleva a los productores ganaderos a financiarse en última instancia con la venta de animales, y en especial de vacas que podrían servir como reproductoras y también vaquillonas».
Por su parte, entre enero y marzo se registró una baja del 5,8% de la faena vacuna, alcanzando los 3,09 millones de cabezas faenadas por parte de los frigoríficos, ya que solo en marzo pasado se faenaron 980 mil cabezas menos que en igual período de 2018.
Al mismo tiempo, según datos de febrero 2019 de la secretaría de gobierno de Agroindustria, se exportaron 33.012 toneladas peso producto (tn pp), es decir un 57,8% más que en el segundo mes de 2018.