Lucas Cabello, el joven de 22 años que ayer a la tarde recibió tres disparos por parte de un efectivo de la Policía Metropolitana en el barrio porteño de La Boca, fue operado esta tarde en el Hospital Argerich y mañana será sometido a una cirugía de médula, informaron sus abogados, en tanto organismos criticaron el accionar policial y diputados porteños presentaron un pedido de informes al gobierno porteño.
A Lucas "le hicieron una traqueotomía y salió favorable, y mañana le hacen la operación de médula", sostuvo en diálogo con Télam Nahuel Berguier, quien junto con Gabriela Carpineti representa a la familia del joven y busca establecerse como querellante en la causa.
El padre del joven, Rubén Cabello, detalló por la mañana que su hijo recibió un balazo "en la pera, otro en el brazo y otro en un testículo", y precisó que los médicos ya le dijeron "que le destrozó la médula y que no va a poder caminar ni utilizar las manos".
Berguier indicó que el efectivo de la Metropolitana que le disparó a Lucas sería llamado a declaración indagatoria mañana, y señaló que cuando los acepten como querellantes van a pedir la prisión preventiva del atacante.
"Entendemos que el policía debe ser procesado con prisión preventiva porque su libertad durante la investigación preliminar podría favorecer el entorpecimiento de la investigación", afirmó, y agregó que "claramente los hechos de las últimas 24 horas muestran eso".
En este sentido, relató que cuando la familia de Lucas volvió del hospital para buscar documentación, había fuera de su casa un vallado humano de la Metropolitana -que se mantuvo hasta hoy- y que recién pudieron ingresar pasadas las 22.
La situación se generó ayer a la tarde sobre la calle Martín Rodríguez al 559 donde "desde hace tiempo y por orden judicial hay una consigna policial" por "una causa de amenazas" entre dos mujeres que habitan el inmueble, en las habitaciones 15 y 16 de un hotel familiar para personas en situación de calle, informó el subjefe de la Policía Metropolitana, Ricardo Pedace.
El oficial explicó que la orden judicial es para todo el grupo familiar por lo que el policía metropolitano acompañó al hijo de la parte damnificada de las amenazas, cuando a las 15:30 de ayer salió a la calle para hacer una compra.
"Según los testigos esta persona se encuentra con otra, el chico que está internado en el hospital Argerich con heridas de armas de fuego, y ambos mantienen una discusión; luego uno de los jóvenes continúa para realizar la compra y se escuchan tres detonaciones de armas de fuego", añadió, sin dar precisiones de lo ocurrido.
"Mi hijo había ido a comprar dos sandwiches de milanesa a la esquina y cuando vuelve le dispara; la nena desde adentro de la casa lo ve todo y los vecinos cuentan lo mismo; este fue un caso de gatillo fácil, quizá hubo alguna discusión, eso no lo sé, pero nunca justifica que le dispare, y fueron dos tiros primero y después un tercero cuando estaba en el piso", dijo por su parte el padre del Lucas, una versión avalado por los vecinos del barrio consultados por esta agencia.
Los familiares de Cabello fueron recibidos este mediodía por el titular de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin), Miguel Angel Palazzani, quien calificó como "fusilamiento" el episodio de ayer, de acuerdo a las pruebas y declaraciones de familiares y testigos con los que se reunió este mediodía.
En diálogo con Télam el funcionario señaló que "el hecho por el cual el joven lucha por su vida en el Hospital Argerich fue una virtual ejecución o fusilamiento".
"Estamos ante un hecho gravísimo de violencia institucional que de acuerdo a las pruebas y declaraciones de familiares y testigos presenciales configura una tentativa de homicidio calificado por parte de un efectivo de la Policía Metropolitana contra el joven Lucas Cabello", dijo Palazzani, para quien "es significativo el despliegue policial que ejerce la Metropolitana en esa comuna del sur de la ciudad de Buenos Aires".
En tanto, legisladores porteños del interbloque del Frente para la Victoria presentaron un pedido de informes y una declaración de repudio ante “las agresiones” que recibió Cabello, y solicitaron “el esclarecimiento del hecho”.
El pronunciamiento se dio en el marco de dos proyectos de los diputados Paula Penacca, del Frente para la Victoria, José Cruz Campagnoli, de Nuevo Encuentro; y Pablo Ferreyra, de Seamos Libres, tras lo ocurrido ayer en Martín Rodríguez al 500, cuando el joven Lucas Cabello recibió disparos del efectivo de la Metropolitana, por lo que permanece internado en el Hospital Argerich.
Los legisladores exigieron al gobierno porteño que “implemente las medidas necesarias para el esclarecimiento del hecho” ante la afirmación de testigos quienes “desmienten que se trate de un enfrentamiento” entre el joven baleado y el agente, y aseguran Lucas no estaba cometiendo ningún delito".
Al igual que la abogada Gabriela Carpineti, los diputados cuestionaron las declaraciones de la vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal, quien dijo que era un caso de “violencia de género”.
"Es un absoluto desconocimiento, esto es un claro hecho de violencia institucional, mencionar que es violencia de género en el transcurso de una investigación en marcha y mientras Lucas Cabello se debate entre la vida y muerte es de una irresponsabilidad absoluta", comentó Carpineti.
