Así lo propuso la diputada nacional de Libres del Sur, Victoria Donda, quien pidió construir la unidad junto al Frente Renovador en Capital Federal y el país «para construir un futuro que sea el proyecto político que gobierne en 2019» durante la cena que conmemoró los 30 años del nacimiento de su espacio.
«No sólo tenemos vocación de oposición, sino de gobierno: necesitamos construir una ‘avenida ancha’ y necesitamos que llegue a Capital Federal, ¿no Sergio?», preguntó Victoria Donda al dirigirse a Massa durante su discurso cargado de homenajes a los dirigentes que fundaron y sostuvieron a Libres del Sur en las últimas tres décadas, y también de contenido político, con un fuerte llamado a la construcción igualitaria de géneros.
«El desafío más grande que tenemos es construir un Estado para darle respuestas a la gente, sin corrupción y sin clientelismo, porque con eso no se le puede dar respuesta a nadie», sostuvo Donda frente a dirigentes como Daniel Arroyo, Carla Pitiot (Frente Renovador), Jorge Ceballos, Federico Masso y Humberto Tumini (Libres del Sur); Leonardo Grosso (Movimiento Evita) y Alicia Ciciliani, del Partido Socialista.
La cena, que se realizó en el Hotel Castelar de la Ciudad de Buenos Aires, se transformó en un hecho político no sólo por la conmemoración del trigésimo aniversario de Libres del Sur, sino por los invitados de casi todo el arco opositor, en donde sólo faltaron dirigentes del kirchnerismo.
De la cena aniversario también participaron el presidente de la Pastoral Social, Carlos Accaputo, y el coordinador Nacional del movimiento Barrios de Pie, Daniel Menéndez, quien fue ubicado en la mesa junto al presidente del PJ porteño Víctor Santa María, quien debió marcharse antes de iniciada la cena.
Allí llegaron puntuales los socialistas Binner y Ciciliani, quienes junto a otros dirigentes de Libres del Sur y el GEN mantuvieron una improvisada charla de Progresistas en el lobby del hotel; antes de subir al primer piso, en donde un grupo de jazz ambientaba el lugar para los invitados puntuales.
Mientras los comensales degustaban la entrada llegaron Sergio Massa y su esposa Malena Galmarini junto con Margarita Stolbizer, y se sentaron en la mesa principal junto a Donda y su marido Pablo Marchetti, Binner, Ciciliani, Leonardo Grosso y la dirigente porteña de Libres del Sur Laura Velasco.
Según pudo saber Télam, la charla de la mesa estuvo centrada en una agenda compartida por los referentes de la oposición, en donde abundaron las preocupaciones por los trabajadores a quienes «la plata no le alcanza» y la lucha por la igualdad de género, un tópico que ha unido a Donda y Galmarini por su militancia compartida en el tema.
El plato principal -lomo con reducción de malbec y puré especiado- transcurrió entre los cuchicheos de Donda y Massa, quienes junto a Stolbizer y Malena comparten una evidente relación de afecto; selfies y debate político impulsado por una puntillosa y estratégica disposición de las mesas, que reunió a los dirigentes de los distintos espacios políticos en una cena en común.
En un clima distendido, en donde no faltó un aplauso de pie para Micaela García, la joven víctima de femicidio en Gualeguay, los dirigentes brindaron por Libres del Sur y renovaron coincidencias que podrían traducirse en un acuerdo electoral.