La notoria ausencia del intendente Fernando Gray en la reunión por zoom del PJ Bonaerense de este último sábado, demostró que la interna por la posible designación de Máximo Kirchner al frente del Partido, no está saldada. Pero también, la posibilidad de que el jefe comunal de Esteban Echeverría se animara a tensionar todavía más la puja al interior del partido.
Finalmente, Gray acudirá a la justicia para intentar impedir que Kirchner conduzca el PJ bonaerense. Las razones se deben a que, desde el 2017, el histórico partido se reparte en manos de dos intendentes: Gray y Gustavo Menéndez, de Merlo. Este 2021, debía ser para Gray, pero el contexto político del país cambió y el peronismo, también.
Gray y Menéndez fueron los intendentes que encabezaron el ala dura del PJ en los momentos de mayor disidencia política con el kirchnerismo puro, una realidad que se agravó todavía más con la derrota del peronismo en las legislativas de 2017. De hecho, el nacimiento del espacio «Unidad Ciudadana», fue una de las formas que encontró el kirchnerismo para construir por fuera de la estructura tradicional.
Así las cosas, el acuerdo que había establecido el Partido, es que los años pares serían para Menéndez y los años electorales, para Gray. Este 2021, el intendente de Esteban Echeverría se preparaba para conducir nuevamente al PJ, pero un llamado del actual ministro del Interior, Wado De Pedro, cambió los planes. La propuesta del funcionario que responde a La Cámpora, es garantizar un equilibrio dentro del movimiento, para que a nivel nacional, el PJ quede en manos del propio presidente Alberto Fernández, y a nivel provincial, en manos de Máximo.
Finalmente, la figura del diputado nacional y actual jefe del Bloque del Frente de Todos en la cámara baja, Máximo Kirchner, se instaló en la contienda interna y sumó el apoyo de varios intendentes del interior y del Conurbano bonaerense. Por supuesto que el capital político se sustenta desde su referencia, siendo hoy Kirchner el principal dirigente de La Cámpora y naturalmente, el hijo de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Este sábado, lo que debía ser un encuentro virtual para calmar las aguas y establecer una fecha para los comicios internos del Partido, terminó por demostrar el enojo de Gray y un terreno cada vez más pantanoso de cara a conformar una lista de unidad. La decisión del intendente por judicializar las elecciones del partido, aumentaron todavía más esa tensión. Las ironías de la historia lograron que la interna del PJ provincial sea la primera causa que tomará el flamante juez federal Electoral, Alejo Ramos Padilla.
En tanto, desde el entorno de Máximo Kirchner, aseguraron que se vieron sorprendidos por la decisión del intendente Gray y lo leen como un intento de «cerrar filas». «(Gray) Está buscando cerrar filas y lo de la judicialización es una apurada», le confiaron a este medio, aunque esperan que los próximos días esas diferencias se puedan dirimir en alguna mesa para finalmente lograr algún acuerdo que no debilite al frente oficialista de cara a las próximas elecciones legislativas de este año.
