Con el paso de la Semana Santa, llegan días con fuertes definiciones en materia de restricciones para enfrentar la segunda ola de Covid-19 en la Argentina. El puntapié inicial lo dieron el presidente Alberto Fernández, el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof y el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta. A partir de hoy, lunes, se espera una agenda cargada de reuniones que tendrán el epicentro en Casa Rosada.
Para las 16 el jefe de gabinete Santiago Cafiero junto a la ministra de Salud nacional Carla Vizzotti convocaron a sus pares de Buenos Aires y CABA y equipos de Salud de las jurisdicciones. No se descarta, a última hora, un diálogo entre Kicillof y Larreta para definir los pasos a seguir. Es que ante la suba de contagios de manera sostenida y a velocidades nunca vistas, se descarta que las nuevas restricciones serán tomadas en conjunto para que abarquen al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
En Provincia quieren volver a Fase 3
Desde provincia insisten con la necesidad de «volver a Fase 3» aunque podría sufrir algunos cambios. Para entender el concepto de Fase 3, por ese entonces se trató del cierre de Talleres culturales, gimnasios en espacios cerrados, actividades sociales, shoppings, colonias, jardines maternales y obra privada. Estos últimos dos son materia de discusión por la urgencia de mantener al máximo la actividad comercial en un contexto con 42% de pobreza a nivel nacional según el último dato publicado por el INDEC.
El gobernador bonaerense confirmó que hay «datos de la variante de Manaos» del coronavirus. En declaraciones a Radio 10, el mandatario provincial expuso que «los números son muy alarmantes. Se veía venir: cuando uno mira la situación en Uruguay, Paraguay, Chile y Brasil, digamos casi que estamos rodeados, venían con un incremento fuertísimo de casos», expuso.
«Ante el aumento tan grande de casos, siguiendo el decreto del presidente Alberto Fernández, la idea fue generar un retroceso en el horario nocturno, instaurando la misma que hay en la Ciudad, que es de 2 a 6 de la mañana, y después limitamos las reuniones de 20 a 10 personas», consignó. «Decidimos seguir con el sistema de fases por municipios, pero sabiendo que lo que se inicia en la Ciudad después pasa al Conurbano y luego al interior», planteó el mandatario en referencia a la ruta de contagios.
