Los trabajadores de la industria del cuero alcanzaron un aumento salarial del tras una discusión paritaria donde se pactó además una cláusula de revisión para noviembre.
«Unidos en la lucha, las y los trabajadores del cuero hemos arribado a una conquista histórica, consiguiendo la actualización del escalafón por antigüedad en justo reconocimiento a todos nuestros años de esfuerzo y compromiso, en el marco de este nuevo acuerdo salarial», ponderó el secretario general del Sindicato de Obreros Curtidores y de la Federación del Cuero (Fatica) Walter Correa.
Para el sindicalista y también diputado nacional del Frente de Todos, el valor agregado de la negociación por mejoras se realzó en pandemia ya que además del 41,5% se acordó un 1% adicional por cada año de antigüedad de los trabajadores que representa, en virtud del incremento de premios a la productividad.
Combo y beneficio
El convenio de salarios establece también que los trabajadores del cuero recibirán incrementos en el premio por presentismo, actualización de complemento por “tareas de trinchado”, como también la compensación por comidas por horas extras y otros beneficios.
En cuanto al trinchado esa etapa del trabajo en el sector refiere al primer paso del proceso de curtido en las curtiembres. Después de dicho rebajado se hace el “piquelado”, etapa en la cual se elimina toda la cal de los cueros.
Con el acuerdo de Fatica también se verifican dos conclusiones paritarias, la primera es que el nuevo piso salarial del 40% es el eje de negociación para este tramo de las discusiones de convenios de salario respecto a los trabajadores registrados y también que el acuerdo de los trabajadores del cuero se enmarca entre los que se sellaron bajo una impronta kirchnerista. Sea por la identidad política que sellaron la vicepresidenta Cristina Fernández en los trabajadores del Congreso, la Anses que comanda Fernanda Raverta o el PAMI a cargo de Luana Volnovich en los respectivos convenios para esos empleados.
En el caso de Correa su pertenencia y protagonismo dentro de esa ala política del Frente de Todos se confirma como un valor agregado que ya se había apreciado incluso como legislador en ocasión del tratamiento y aprobación de la Ley de Teletrabajo.
