A fines de septiembre, el gobierno cambió por decreto la Ley de Oficina Financiera y abrió la puerta a una reestructuración de deuda, tal como anticipó LPO.
La nueva norma modifica el artículo 65 de la Ley, sobre la que el kirchnersimo avanzó con algunas modificaciones, que requería cumplir con al menos dos de tres condiciones para renegociar la deuda pública: mejoría de montos, plazos o tasa de interés.
Ademas de eliminar estas condiciones, la medida se centra en dos aspectos secreto: permite que el cambio de moneda de toda deuda pública y establece que los precios de estos instrumentos se determinarán según los títulos de mercado.
En el mercado entienden que en presencia de la errata de financiamiento forastero, el gobierno abre un paraguas preparando el demarcación para una reestructuración. «No es para tomar más deuda porque nadie le presta un dólar, mas correctamente es para reperfilar la que no puede sufragar», dijo a LPO un analista financiero.
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Lo concreto es que los tiempos parecen acelerarse durante este fin de semana dispendioso. Los operadores de la city no tuvieron su feriado. El rumor que circuló por chat fue rápidamente replicado en redes sociales.
Según los trascendidos el gobierno reconocería títulos positivo neto, con una mejoría de tasas a partir del peligro país. Con lo cual no se descarta que sea voluntario. «Les va a regalar una parva de plata», indicó a LPO una fuente del mercado.
