Eternas protagonistas de la política argentina, la jueza electoral María Romilda Servini de Cubría ratificó este viernes que la expresidenta Cristina Kirchner es la única candidata para presidir el peronismo. La añeja magistrada le bajó el pulgar a la resistor que intentó el representante riojano Ricardo Quintela, el único dirigente provincial que al menos intentó diferenciarse de la ‘sumisión’ en que, más allá de algunas declaraciones, cae el peronismo desde hace 20 abriles cada vez que la figura de CFK está de por medio. Sobre la argumentación de Servini, habría ratificado que había irregularidades en los avales presentados por Quintela.
La interna del peronismo se había judicializado ciertamente por una presentación de Quintela delante el Judicatura de Servini, luego que la Juntura Electoral del PJ, dominada obviamente por el kirchnerismo, impugnado la cinta ´Federales, un rugido de corazón´ por esos presuntos problemas de avales.
Ratificada entonces por Servini la valor de quitar de la terreno a la cinta de Quintela, la venida de la expresidenta a la conducción partidaria será al punto que un trámite, y la novedad de este viernes por la tarde fue un llamado de allegados de CFK a Quintela, porque «Cristina quiere escuchar y construir un partido de todos».
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«Lo llamó a través de su secretario a eso a las 17; atendió el secretario de Quintela, que no la pudo comunicar con el representante porque estaba en el interior», señaló un cable de la Agencia Informativo Argentinas (NA).
El mensaje de Fernández de Kirchner era convocarlo, como a tantos otros dirigentes, a una reunión el lunes o martes, indicaron las fuentes citadas por NA.
«Cristina quiere surtir reuniones con todos, por eso no hubo ningún ofrecimiento a Quintela ni siquiera está pensado», aclararon cerca de la ex mandataria. El secretario del representante riojano le dijo a la ex mandataria que le transmitiría el mensaje a Quintela.
«La intención de Cristina es seducir a todos los que tengan responsabilidades para construir un partido de todos», dijeron a esta agencia desde el Instituto Estado. Pese a la apelación que habían hecho los apoderados de la cinta del riojano, Jorge Yoma, Daniel Llermanos y Sandra Vanni, quienes plantaron la insuficiencia en la fundamentación y la invalidez en las observaciones de la Juntura Electoral tras Desarrollarse invalidado la postulación, Servini respaldó los motivos expuestos por el víscera partidario y convalidó la cinta ´Primero la Estado´, encabezada por Kirchner.
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En el desacierto fechado este viernes 1° de noviembre, Servini precisó que el arbitrio planteado es «insuficiente» para contrarrestar la valor y expuso que, más allá del total de 70.531 avales que la cinta de Quintela asegura Desarrollarse presentado, en 4.703 planillas, la Juntura Electoral contabilizó un total de 60.755 avales, en 4.464 planillas.
De esos avales, un total de 6.809 fueron observados por yerro de documentación y otros 5.195 por irregularidades en los datos.
«La presentación de avales es uno de los requisitos indispensables para oficializar los candidatos de las distintas líneas internas. Tal exigencia debe entenderse como el en serie exiguo de consenso que debe reunir un candidato para aspirar a competir en una sufragio, para que cuente con una necesaria representatividad de los afiliados, constituyendo de esta forma una verdadera fuerza política», argumentó Servini.
La delicada posición de Kicillof
Tras la resolución de Servini, este viernes el senador y número dos de La Cámpora, Eduardo ´Wado´ de Pedro, volvió a idear cuestionamientos a la figura del representante porteño Axel Kicillof, por no haberse pronunciado en amparo de la candidatura de Fernández de Kirchner.
«Él no le dio importancia al partido, me parece perfectamente porque está trabajando, está gestionando la provincia más espacioso la Argentina, es deductivo que el representante esté dedicado a la diligencia», señaló Wado, pero luego de esas frases diplomáticas, dejó en claro que la postura de Kicillof le genera «desconcierto».
«Si me preguntás por qué pasa esto, no lo sé. No lo puedo entender..», indicó De Pedro, que al Afirmar esto «esto» se refería a que Kicillof no había mostrado la habitual sumisión que en el Instituto Estado se daba por descontada.
«No es deductivo que no se acompañe a uno del espacio nuestro con una enunciación, porque me parece que se perjudica él», dijo Wado. «¿Qué está pasando que poco de sentido popular no está sucediendo?», se lamentó el camporista, en relación al «silencio» de Kicillof.
«Me hubiera gustado que Axel se pronunciara a amparo de Cristina hasta por una cuestión sentimental, me gusta que estemos juntos. No puedo concebir que esté en otra cosa, me duele y lo veo raro; no le hace perfectamente a él como persona», insistió De Pedro. El ex ministro de Interior estuvo esta semana en Avellaneda, demarcación que gobierna Jorge Ferraresi, uno de los alfiles de Kicillof que más Extranjero llevó la confrontación con La Cámpora.
En su discurso, De Pedro se refirió allí al «dolor» que siente delante «los oportunistas» que miran para otro flanco en la interna del PJ, saeta obviamente dirigido a Kicillof, el mismo Ferraresi y todos los que no aplaudieron la venida de Cristina al timón del PJ.
HB
