Los principales afectados por el deterioro del mercado laboral son los trabajadores informales y cuentapropistas, a quienes, en muchos casos, la merma en los ingresos podría ocasionarles caer por debajo de la línea de pobreza, según la consultora Ecolatina. Los empleados formales al 2do. Trimestre de este año son 5,6 millones según datos de CETyD y los informales. En tanto los informales y no asalariados alcanzan los 3,9 millones de personas.
En este marco, el Gobierno prorrogó la prohibición de suspensiones y despidos sin justa causa o por falta o disminución de trabajo y razones de fuerza mayor, hasta el 25 de enero próximo como así también la doble indemnización.
La extensión de la medida recibió críticas “en off” por parte de los empresarios quienes argumentan que las sucesivas prórrogas generan incertidumbre sobre cómo manejar la dotación de personal en un contexto en el que no ven consolidada la recuperación.
Además de la preocupación por el desempleo y la caída del salario real, la CGT planteará específicamente su preocupación por la situación de los jubilados. Y también el “retraso” de los sueldos públicos, según adelantaron fuentes sindicales a Ámbito.