Argentina le compró a Francia cinco aviones que deberán ser reparados y no podrán usarse para el G20
Tras dos años de que se iniciaran las primeras tratativas y en la mitad de un fuerte recorte presupuestario, la Argentina viró los fondos y por último le pagó esta semana a Francia 12,5 millones de euros por la adquisición de 5 aeroplanos Super-Etendard franceses para la Armada.
Pero hay un detalle que no es menor en toda esta operación: las aeronaves habrán de ser reparadas por un importe estimado de otros 5 millones de dólares antes de volar y no van a poder ser utilizadas para la seguridad de la cima de presidentes del g20 como pretendía el presidente Mauricio Macri.
La Dirección General de Administración Financiera del Ministerio de Defensa trasfirió esta semana a París el pago de 12,5 millones de euros por los Super-Etendard y concretó de este modo una negociación que tuvo muchas idas y vueltas por las limitaciones presupuestarias de la Argentina.
El pacto entre los dos países se firmó en el tercer mes del año del 2018 y en la resolución que apareció en el Folleto Oficial se «estableció como una de las maneras de colaboración que adoptarán las partes, la adquisición de equipamiento, de sistemas o bien de tecnología de defensa y de sostén logístico, de su mantenimiento y de su formación pertinentes».
A lo largo de su visita a París el 26 de enero pasado, Macri firmó con su par Emanuel Macron el compromiso final para la adquisición de estos aeroplanos que se usaron en su instante en la guerra de las islas Malvinas. «Los Super-Etendard son aeroplanos actualizados y sus equipos van a estar libres para las Fuerzas Armadas Argentinas», afirmó el premier francés en ese viaje frente a un sonriente Macri.