A sólo dos días del triunfo electoral de Cambiemos, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, se reunió ayer con la cúpula de la CGT, como parte del diálogo que sostienen para avanzar en aspectos transversales de la tan mentada reforma laboral.
Pero, claro, el resultado del domingo acelera los pasos: a esta convocatoria, que tuvo como puntos principales el proyecto de blanqueo y las llamadas “prácticas formativas”, se sumó el llamado de Macri a un encuentro en el CCK para el lunes, cuando el Gobierno planea presentar abiertamente a empresarios, sindicalistas y gobernadores sus planes reformistas en busca de consenso.
“En la reunión se avanzó sobre los temas que venimos hablando, fundamentalmente el blanqueo laboral y la formación profesional, y se les transmitió la convocatoria para la próxima semana que anunció el Presidente”, comentó a El Economista una fuente del Ministerio, quien aseguró que “aún no se terminó de definir nada” pero se mostraron muy conformes con el encuentro.
El blanqueo incluiría un perdón de deudas para los empleadores y un recorte en las indemnizaciones por despidos para los trabajadores no registrados. El acuerdo en ciernes también incorporaría el relanzamiento de las pasantías -presentadas ahora como prácticas formativas-.
Además de los triunviros Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña, participaron Armando Cavalieri (Comercio), Omar Maturano (La Fraternidad) y Andrés Rodríguez (UPCN), entre otros, quienes buscan acordar algunos puntos con el Ejecutivo a cambio de conservar el modelo sindical y el control de las obras sociales, bajo la promesa de que la reforma no será “a la brasileña”.