El titular del Banco Mundial (BM), Jim Yong Kim, almorzó ayer con el presidente Mauricio Macri, y prometió al país una ayuda financiera de u$s 2000 millones para el año que viene, que serán otorgados en partes iguales para el sector público y el privado. Además, elogió la economía argentina y remarcó que «va en la dirección correcta».
Los «fondos frescos» de los que habló Kim irán para el pago de la Asignación Universal por Hijo (AUH), créditos para las pequeñas y medianas empresas, planes educativos para jóvenes y energías renovables, donde desde este mes rige una garantía de u$s 480 millones del BM para apoyar la inversión privada. Desde que comenzó el gobierno de Macri, el organismo prestó u$s 2325 millones para financiar al sector público.
Fue la primera vez en 25 años que un titular del BM llegó al país, luego de la visita del estadounidense Lewis Preston en 1992. Y como se preveía, el coreano Kim endulzó los oídos del Presidente, en su semana de ensueño.
«Estamos acá por las reformas que implementó el Gobierno, con sus políticas de apertura comercial, integración al mundo y transparencia. Esa es la forma de sacar gente de la pobreza; no es ideología, es evidencia», afirmó Kim.
Con el tema de la pobreza, el ejecutivo coreano tocó una de las fibras más sensibles del Gobierno y le dio toda su confianza. «Macri lee muy bien la situación internacional; tiene un diagnóstico adecuado y no se apura en todo lo que hay que hacer porque cuida a los pobres», expresó Kim.
Se trató de un nuevo respaldo desde el exterior para Macri, después de la visita esta semana del vicepresidente norteamericano, Mike Pence, junto a comerciantes y potenciales inversores norteamericanos.
El mandatario aprovechó la oportunidad para criticar a los referentes de la Confederación General de los Trabajadores (CGT), que se movilizarán el martes a la Plaza de Mayo. «Perdieron la capacidad de escuchar a la gente; uno esperaba que nos acompañen en este camino», fustigó.
Con molestias visibles para caminar tras su operación de la rodilla derecha, el miércoles, Macri se envalentonó: «A todos los argentinos nos debería emocionar que venga el presidente del Banco Mundial a darnos su confianza».
«Gracias a lo que hemos avanzado en este año y medio hemos vuelto a tener más crédito que repago de préstamos, revertimos esa cuestión», celebró el Presidente en el inicio de la conferencia de prensa que ofreció junto a Kim.
Para el titular del BM la economía argentina crecerá 2,7% este año (en la misma línea que el PBI global) y, pese al amplio respaldo, dijo que hay en el mundo inversores con 40 billones de dólares que buscan «retornos altos» y es «una oportunidad para Argentina».
En ese sentido, Kim alertó que para que esos capitales se entierren en el país es «importante que haya estabilidad y no se cambien estas políticas» en un futuro, «Todos buscan claridad y seguridad jurídica», concluyó el coreano.