Fuentes policiales le revelaron que el trágico suceso ocurrió el jueves feriado por la noche. Un hombre llamó al 911 para informar que su hijo se había disparado en la cabeza en un domicilio de la calle Alsina al 700, en pleno centro de la localidad de Banfield.

Una vez que llegó al lugar el personal médico y policial, constataron que el implicado era Matías Malla, Subcomisario de la División Sala de Situaciones Complejas de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. A pesar de haberse dado un balazo, todavía estaba con vida.

El oficial fue trasladado de urgencia al Hospital Gandulfo de Lomas de Zamora, pero lamentablemente, los médicos no pudieron salvarle la vida y falleció con sólo 39 años, según los datos acercados a este medio.

De acuerdo a las primeras informaciones de voceros policiales, el agente había llegado a la casa de Banfield después de haber mantenido una fuerte discusión con su expareja. Momentos después, tomó la drástica decisión de quitarse la vida.