La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, cuestionó que «el comportamiento» de la vicepresidenta Cristina Kirchner y del presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, en la pelea por un lugar en el Consejo de a Magistratura «amerita un juicio político«.
«Hay una falta de apego total y absoluto de Cristina y todo el complejo peronista/kirchnerista respecto a las instituciones. Es decir el hecho de poder cambiar, romper un bloque para quedarse con un cargo y para tratar de dominar el Consejo de la Magistratura», criticó la exministra de Seguridad del mandato presidencial de Mauricio Macri en un diálogo con Radio Rivadavia.
En ese sentido, consideró: «El comportamiento de Cristina Kirchner y de Sergio Massa en la pelea por un lugar en el Consejo amerita un juicio político. Toman a las instituciones como si fuesen un chicle y las manipulan de la peor manera«.
La dirigente política hizo hincapié en que el objetivo desde Juntos por el Cambio es permanecer atentos en el cuidado de las instituciones, luego de que el miércoles por la noche el bloque del Frente de Todos en el Senado se dividió en dos, lo que le valió al oficialismo un lugar más en el Consejo de la Magistratura. Esa decisión dejó afuera a Luis Juez, senador de JxC.
«Ahora están en la desesperación del manotazo de ahogado, en un momento en el que utilizan cualquier tipo de recurso», dijo el exministra sobre Kirchner y Massa, y resaltó que el copartamiento de la vicepresidenta es para «zafar».
Para Bullrich, la sociedad debe hablar sobre la estrategia del oficialismo para obtener un lugar en el organismo que determina la elección y sanción de los jueces. «Uno va por la calle y no se habla del tema, cuando el tema sale, importa. Debemos darle la debida importancia, y cuando los temas no son de todos los días también hay que explicar por qué es importante», afirmó.
Respecto a las internas dentro del Frente de Todos, la líder del PRO criticó que Alberto Fernández y Cristina se necesitan el uno al otro para coexistir, y que son «un matrimonio por convivencia». «Alberto Fernández dijo las peores cosas de Cristina. Esto demuestra no solo el nivel de la relación sino el de traición que entre ellos pudieron tener», señaló. Sin embargo, el Presidente insistió ayer en la unidad de cara a 2023: «¡Un carajo estamos perdidos!», aseguró en un encuentro con militantes.
La división del Frente de Todos descolocó a la oposición, pero también a algunos oficialistas. Aunque puertas adentro se dejó en claro que el objetivo para pasar de una bancada a dos era conseguir un lugar más dentro del Consejo de la Magistratura, varios legisladores sospechan que además el kirchnerismo busca despegarse un poco más de la Casa Rosada, tal como indicaron fuentes parlamentarias a BAE Negocios.
En medio de denuncias mediáticas y judiciales, desde el bloque de senadores oficialistass anunciaron que se partirían en dos: el Frente Nacional y Popular, conducido por José Mayans; y Unidad Ciudadana, presidido por Juliana Di Tullio. El primero con 21 miembros, que en su mayoría responden a los gobernadores; y el segundo con 14 kirchneristas, a excepción de unos pocos. Todos continuarán trabajando juntos en el interbloque del Frente de Todos.