El Gobierno alcanzó un “entendimiento” con el Club de París y pagaría una suma parcial para evitar que ese consorcio de naciones declare a la Argentina en default a fines de julio.
El ministro de Economía Martín Guzmán anunciará esta tarde que el Poder Ejecutivo llegó a un entendimiento con ese grupo de países, lo que implicará un pago de 430 millones de dólares, de los USD 2.500 millones que debe el país en su totalidad transcurridos siete años del acuerdo firmado en 2014.
Según adelantaron fuentes oficiales, se tratará de un acuerdo “de buena voluntad” pero no el “acuerdo definitivo” con el Club de París, que será terminado de negociar más adelante. La operación cuenta con el visto bueno del Fondo Monetario Internacional, que en las próximas horas dará a conocer un comunicado en el que “saludará” el avance de las conversaciones entre las partes.
La Argentina pasó el 30 de mayo como última fecha de pago hacia ese consorcio de naciones y se abrió una ventana de 60 días hasta fines de julio. Tras ese plazo de gracia, los países miembros podrían declarar al Estado argentino en situación de impago de su deuda.
De todas formas, el Gobierno ya había adelantado su intención de negociar una salida “temporal” por la cual, sin completar una reestructuración de los USD 2.400 millones, pudiera conseguir un aval del FMI para que ese consorcio de naciones no considere la falta de cancelación de ese saldo como un evento de impago.
Ese paso será transitorio: para una readecuación de los términos del acuerdo rubricado en 2014 el Club de París pedirá, como prácticamente desde su fundación, que la Argentina cuente con un programa financiero vigente con el FMI. En términos prácticos, el ministro de Economía Martín Guzmán buscará reducir la tasa de interés de 9% que rige desde 2019 y plazos de devolución más amplios.
La Casa Rosada apostó a que las dos giras por Europa que encabezaron Guzmán y más adelante el propio Alberto Fernández para tejer apoyos de mandatarios europeos allanasen el camino para que el Club haga pública una minuta -como lo hace tradicionalmente, por consenso entre sus miembros- para que la no cancelación de esos USD 2.400 millones no sea considerada por ese foro como una cesación de pagos. Este entendimiento estará reflejado en esa decisión que harán pública los miembros del consorcio de naciones.