Funcionarios del Gobierno bonaerense y representantes de gremios docentes de la Provincia se reunieron en la sede del Ministerio de Economíal. Del encuentro no participaron los tres ministros encargados de la negociación salarial, ni los principales referentes de SUTEBA, Roberto Baradel, y de la FEB, Mirta Petrocini.
Con la reunión de Mesa Técnica Salarial en La Plata, el Gobierno de María Eugenia Vidal intentó destrabar el tenso conflicto con los gremios docentes, que ya se cobró 9 días de medidas de fuerza desde el inicio del ciclo lectivo del 6 de marzo.
Desde las filas sindicales habían afirmaron ayer que asistían al encuentro siempre y cuando quede claro que no se desarrollaba bajo el formato de audiencia de conciliación obligatoria, y sí de negociación paritaria.
Sin embargo, con el encuentro concretado, la conflictividad seguirá presente en territorio bonaerense, aunque en formato menguado: con clases en general, ya sin una huelga extendida (el único que confirmó un paro fue UDOCBA) y con asambleas en algunas escuelas y jornadas de protesta, según el distrito.
Y más allá del round de este lunes con la gestión de Vidal, mañana arrancará un nuevo paro nacional de 48 horas, en rechazo a la decisión de Mauricio Macri de no convocar a los gremios docentes federales a una paritaria docente nacional para discutir una suba del piso salarial de los maestros a nivel país.
En este caso la estocada fue lanzada por CTERA, UDA y los privados de SADOP, e incluirá una «marcha federal» el miércoles a Plaza de Mayo, que se nutrirá con maestros de todo el país.
Por ende, en la provincia de Buenos Aires volverá la postal de aulas vacías mañana, aunque en el marco de una medida de fuerza que pierde potencia con el correr de los días, en buena parte por la política de quitas salariales aplicada por los gobernadores para el caso de los maestros que paran.
Pero en tierra bonaerense además incidió el giro más moderado asumido por la FEB de Mirta Petrocini, quien decidió no sumarse a la huelga nacional de 48 horas de la semana pasada, aunque Roberto Baradel (SUTEBA) negó una ruptura y recordó la movilización del pasado jueves en La Plata.
En Buenos Aires rechazaron a Vidal una propuesta de suba del 19% en 3 cuotas ajustables por inflación, más una suma fija. Ahora, con la escalada de 8 días de huelga y una jornada de protesta, avanzaron las quitas a los sueldos de los docentes en conflicto y con el salario de marzo sufrirán un tijererazo por 4 de esos días.
En las últimas horas, desde SUTEBA advirtieron que irán a la Justicia para denunciar «descuentos masivos» que, por caso, alcanzaron a trabajadores con licencia por embarazo o enfermedad.
Vidal además confirmó que pagará un plus de 1.000 pesos para los maestros que nunca pararon -con el sueldo de abril- y abrió la puerta para una eventual quita de personería gremial para los sindicatos que desoyeron la conciliación obligatoria, vía una presentación ante la cartera de Trabajo nacional.
A partir del carácter de test clave que asumió la pulseada bonaerense, en las últimas horas Vidal instó a otros gobernadores a respaldar la decisión de Macri de vaciar la paritaria federal y darle mayor protagonismo a los mandatarios, a pedido -dijo- «de una veintena de gobernadores».