A tan sólo un año y medio de la derrota electoral de 2019, Juntos por el Cambio logró reposicionarse y se impuso con comodidad en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en la mayoría de los distritos del país.
Con el triunfo de María Eugenia Vidal en la interna en la Ciudad y de Diego Santilli en la provincia de Buenos Aires, el mandatario porteño, Horacio Rodríguez Larreta, salió fortalecido en medio de la puja por el liderazgo de PRO, pero también dentro de la coalición opositora. Por el contrario, la figura del ex presidente Mauricio Macri quedó desdibujada, más aún después de que la lista que él mismo confeccionó en Córdoba, con Mario Negri a la cabeza, perdió por una diferencia de 20 puntos ante la lista de Luis Juez.
Como se preveía, en la Ciudad de Buenos Aires, María Eugenia Vidal venció en la interna con el 33 % de los votos. La candidata por la que apostó Rodríguez Larreta logró una diferencia de 22 puntos con el ex ministro de Economía Ricardo López Murphy, que obtuvo 11% de los votos. El ex ministro de Salud Adolfo Rubinstein alcanzó el 4% de los votos, duplicando así el porcentaje que arrojaban las encuestas. En total, entre las tres listas, acumularon el 48% de los votos. Los tres postulantes compartieron escenario en el búnker de Costa Salguero, ubicado en el barrio de Palermo, pero sólo los dos primeros hicieron uso del micrófono.
En las PASO de 2017, en ese distrito, lo que entonces era Cambiemos sacó el 49,55% de los votos. En aquella oportunidad, Martín Lousteau compitió por fuera de la alianza opositora y obtuvo el 13% de los votos. Si se suman esos porcentajes, Juntos por el Cambio debería haber llegado al 63% para empardar la elección de hace cuatro años.
Sin embargo, cerca de la ex gobernadora bonaerense se conformaban con que Vidal tuviera un piso del 30%. Superó apenas 3 puntos esas estimaciones. López Murphy quedó 4 puntos abajo de lo que se esperaba, aún así consiguió asegurarse el cuarto lugar en la lista definitiva de Juntos por el Cambio que competirá en las elecciones generales del 14 de noviembre próximo.
En el búnker porteño celebraron los números pero con prudencia. No sólo por consejo de sus asesores en comunicación, debido a que la votación se dio en el marco de la pandemia de COVID-19, sino también porque miraron con preocupación el 13% de los votos que obtuvo el economista Javier Milei, quien cosechó una parte de los votos que antes eran de Juntos por el Cambio, según analizaron en la coalición opositora.
En la provincia de Buenos Aires, con casi el 23% de los votos, Diego Santilli sacó una ventaja de 12 puntos frente a Facundo Manes, que alcanzó el 15% de los votos. Entre ambas listas, la principal fuerza opositora logró superar el 34% de los votos que obtuvo en las primarias de 2017 para la categoría de diputados nacionales. Con el 38% quedó por encima de la lista del Frente de Todos, que encabeza Victoria Tolosa Paz, que sacó el 33%, lo que significa una fuerte derrota para el oficialismo, que debilita al gobierno de Alberto Fernández.
A diferencia de 2017, cuando el peronismo se presentó dividido, esta vez Juntos por el Cambio logró captar el voto antiperonista y revalidar su liderazgo opositor en un escenario en el que el kirchnerismo y el peronismo fueron unidos.
“¡Felicito a Luis Juez y la lista Cambiando Juntos por la gran elección! Los cordobeses dieron su mensaje al kirchnerismo de una forma contundente. Juntos por el Cambio es la herramienta de la sociedad para frenar el populismo. ¡Ahora vamos unidos a noviembre!”, sorprendió Negri, precandidato a senador por una de las listas que competían en la interna de Córdoba, a través de su cuenta de Twitter, adelantándose a los resultados oficiales cuando la diferencia a favor de su contrincante era ineludible.
Negri se presentó junto al ex ministro de Turismo Gustavo Santos, que aspiraba a encabezar la boleta de diputados, tras sellar un acuerdo con Mauricio Macri, que se encargó personalmente de llevar adelante las negociaciones para el armado de esta lista. Si bien el ex presidente no viajó para sumarse a la campaña, cada vez que pudo destacó su apoyo a la lista de “Juntos por Córdoba”. La derrota del jefe del interbloque de diputados fue leída rápidamente como un revés para el ex mandatario, nada más y menos que en el distrito que lo catapultó a la presidencia.
Por el contrario, los ganadores, Juez y Rodrigo de Loredo, de “Cambiando Juntos”, contaban con el visto bueno de la presidenta de PRO, Patricia Bullrich, que decidió confrontar a Macri en Córdoba, casi como una devolución de gentileza por no haber tenido una participación más activa para que ella encabezara la lista en la Ciudad de Buenos Aires.
Macri sintió otro cimbronazo en Santa Fe. La lista que apoyaba -la única ciento por ciento de PRO-, encabezada por Federico Angelini y Amalia Granata, quedó sorpresivamente en tercer lugar. La interna de Juntos por el Cambio en esa provincia la ganó la lista “Cambiemos con Ganas”, que preside Carolina Losada y Mario Barletta, superando todos los vaticinios que hicieron dentro del macrismo. Entre las cuatro listas, la alianza opositora superó por 10 puntos al Frente de Todos.
En Mendoza, el radicalismo hizo una muy buena elección, similar a la de hace cuatro años, cuando sacó 41% de los votos. Esta vez, obtuvo dos puntos más. El Frente de Todos apenas consiguió el 25% de los votos. En Entre Ríos, Juntos por el Cambio llegó al 51%, haciendo una diferencia de 21 puntos con la lista del oficialismo.