Dolores: otro audio revela los aprietes de Camilo Etchevarren para rechazar pacientes del Hospital municipal
Sigue el escándalo en torno al intendente de Dolores, Camilo Etchevarren, que parece llevar una política de aprietes y amenazas que entorpecen y hacen tanto mal al distrito que cada vez gestiona peor.
La forma de hacer política de Etchevarren está quedando a la luz y son cada vez menos los profesionales y funcionarios que soportan tan poca capacidad de gestión pública. Uno de los casos más relevantes fue la del director del hospital San Roque, Jorge Sepero, quien presentó la renuncia a su cargo.
El exdirector del nosocomio en su renuncia denunció el vaciamiento de la salud en Dolores, la mala utilización de fondos. Como también el desinterés por la salud de los vecinos por parte del Gobierno local.
Ante esto, Camilo Etchevarren no tuvo mejor idea que hacer una conferencia de prensa para defenderse.“No voy a hacer política con la salud y mucho menos con el hospital de Dolores. Porque esto es lo que tenemos que dejar bien en claro: el hospital es de todos…”, señaló Camilo Etchevarren.
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Etchevarren negó que hubiese recortes en salud y sostuvo: “El doctor Sepero faltó a la verdad. No es como dice este señor, que él renunció. Yo le pedí la renuncia”.
Audio: Camilo Etchevarren niega la atención a los vecinos de Dolores y los deriva a La Plata
Cuando se abre la olla, se abre del todo, mientras Etchevarren se defiende, trascendió un nuevo audio que lo vuelve a poner en su lugar: se lo escucha al intendente presionando a Sepero para que se deshaga de ciertos pacientes y “los manden a La Plata”.
El caso de una mujer con 22 semanas de embarazo y con el feto muerto generó una discusión entre el jefe comunal de Dolores y el entonces director del hospital:
-Sepero: “Era una inducción al parto”
-Etchevarren: “¿Por qué no a La Plata?”
-Sepero: “Es vergonzoso mandar a una enferma de estas características a La Plata”
Lo cierto es que esta sería una de tantas situaciones que terminaron de colmar la paciencia de Jorge Sepero y lo llevaron a presentar la renuncia a la dirección del hospital.
Ahora está por verse si el intendente de Dolores sigue repitiendo que los demás mienten, o tendrá que asumir, ante las pruebas contundentes, que el que miente es él.
Tras 12 largos años de una gestión cada vez más cuestionada, muchos sostienen en Dolores que la paciencia se agotó no solo para el ex director del hospital. El hartazgo es generalizado y se presume que los dolorenses actuarán en consecuencia.
