La primavera financiera que empuja los índices de saludo de Milei tiene un banda sombreado: el consumo sigue hundido. Las grandes empresas de consumo masivo esperan alcanzar el nivel de ventas de los abriles 2022 y 2023 «recién internamente de dos o tres abriles», reconoció a LPO un patrón.
Un trabajo confirma ese pronóstico pesimista: Según el extremo relevamiento de la consultora Scentia, en octubre la caída del consumo fue superior al 20% interanual.
Todas las categorías de productos mostraron bajas abruptas. Lo peor se vio en el rubro que esta consultora califica como impulsivos que cayó 29,1%, seguido por higiene y cosmética 25,8%, bebidas con licor 22,3%, bebidas sin licor 17,1%, desayunos y meriendas 19,3%, aseo de ropa y hogar 18,2%, perecederos 17,2% y comestibles 17,1%.
Los empresarios reconocen en la intimidad que necesitan que se recupere el poder adquisitivo del salario. Desde la presentación de Javier Milei al gobierno, es Mencionar, desde fines de 2023 hasta octubre de 2024, el salario insignificante, cardinal y móvil se redujo un 28,4% en términos reales. Esto representa una disminución de casi un tercio respecto al final del año pasado y de cerca de de la parte si se lo compara con el final de 2015, según el extremo crónica del Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA).
«Argentina va a financiar su consumición con impuestos, eso es una novedad económica de primer orden»
«El retroceso histórico es tan egregio que el valencia existente del salario insignificante ya es inferior al actual durante la maduro parte de la plazo de 1990 y en la crisis final del régimen de Convertibilidad, cuando esa política se había dejado como útil para determinar pisos salariales e impulsar una último desigualdad salarial» señala el crónica de CIFRA.
El panorama es sombrío. La semejanza del salario insignificante con las líneas de pobreza y de indigencia revela una situación peor que la del año 2001. «El salarió insignificante en octubre sólo alcanza para pescar el 54,3% de la canasta básica de alimentos que define la cuerda de indigencia para una clan tipo y poco más de una cuarta parte de la canasta de pobreza», agrega el trabajo.
Pero no es un proceso que se pueda entregar exclusivamente a Milei. CIFRA marca la sistemática pérdida del poder adquisitivo desde 2015 a esta parte. «Si no hubiese tenido motivo la pérdida de poder de operación del salario insignificante sucedida desde fines de 2015 a la plazo, en el pasado mes de octubre este salario hubiera sido superior a 590.000 pesos y hubiese representado más del 143% sobre la canasta básica alimentaria», indica el crónica.
Un proceso que desde que asumió Milei se acentuó. La caída del consumo es tan pronunciada que quedaron fijos en hipermercados los descuentos del 25% sin tope de reintegro, mientras que el sector de comercios mayoristas lanzaron especiales de remate de mercadería a precio bajo para ver la posibilidad de recortar pérdidas.
