El Gobierno elevó este miércoles el proyecto de ley de Renta Inesperada al Congreso, destinado a quienes generaron ganancias extraordinarias a causa de la guerra en Ucrania. En medio de las críticas de distintos sectores de la sociedad, el oficialismo avanza con esta iniciativa, que en palabras del ministro de Economía Martín Guzmán, es «un estricto acto de justicia social».
Desde el oficialismo estimaron que la recaudación por el impuesto sería de US$1.000 millones y alcanzaría a aproximadamente 360 grandes empresas que operan en el país.
¿En qué consiste la iniciativa de Renta Inesperada?
El Ejecutivo apuntará a ganancias “extraordinarias”, aquellas que no responden a un incremento de la inversión sino al efecto del shock internacional de precios que provocó la invasión rusa y la guerra en Ucrania. Se trataría de una alícuota por única vez sobre la renta no asociada a incrementos en la inversión, sino que se explique por el salto de precios internacional.
Este martes, Guzmán participó del foro de la Asociación Empresaria Argentina (AEA) y aclaró que no se trata de un nuevo impuesto: «es una sobre alícuota de un año en un contexto de guerra en Ucrania que ha generado un gran problema distributivo en todo el mundo».
Además, comentó que hay países «que ya lo adoptaron, para sectores específicos. Por eso, para nosotros es importante, porque el Estado tiene la responsabilidad de establecer reglas de juego para una sociedad que progrese«.
Cabe recordar que cuando el ministro de Economía presentó la iniciativa en abril, sostuvo que para que las empresas sean consideradas dentro del impuesto, “la ganancia neta imponible real tiene que haber aumentado de forma significativa en 2022 en relación con 2021″ y que “el resultado ordinario (el margen de ganancia) también tiene que ser anormalmente elevado en 2022″.
¿A quién alcanzaría la Renta Inesperada?
El Gobierno nacional estimó que la recaudación puede alcanzar a US$1.000 millones y sería pagado por entre 350 y 360 grandes empresas que operan en el país.
Desde el Palacio de Hacienda no descartan que una parte de ese monto comience a ingresar a las arcas del fisco durante 2022 en concepto de retenciones o adelantos, aunque esa posibilidad depende de la reglamentación que luego de la sanción de la ley instrumente la AFIP.