El triunfo de Fernández y Kicillof conduce a Facundo Celasco a la Intendencia de Dolores
Tras la contundente victoria del Frente de Todos a nivel nacional y provincial, las caras largas invadieron los bunkers de Cambiemos, incluso en distritos en donde el oficialismo todavía no perdió.
En varios municipios a fines a Macri, el sabor a victoria fue fugaz. El aluvión de votos a Alberto Fernández y de Axel Kicillof, no solo aplastaron, sino que terminaron de quebrar la débil estructura política del oficialismo.
El principal temor de los intendentes que lograron una ajustada victoria es perder la ventaja por la avanzada kirchnerista.
En Dolores, a pesar de la victoria de Camilo Etchevarren, la imagen no coincide con la del ganador. La preocupación de perder la intendencia en la que se encuentra hace 12 años, está marcada por varios puntos.
Días de descanso
Con la misma actitud, que el domingo a la noche tenia Mauricio Macri cuando mandaba a dormir al pueblo argentino, Camilo Etchevarren, con un espíritu desgastado pedía un descanso de varios días.
El cansancio expuesto, a pesar de haber sumado un puñado de votos más que la segunda fuerza, deja entrever que día tras día , las demandas y reclamos de los dolorenses pesan en la mochila del jefe comunal.
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“Nos tomaremos unos días de descanso» anunció Camilo Etchevarren, luego de los comicios.
En medio del temor, la intención tras la pausa política, es darle el tiempo al oficialismo para planear la forma de salir del pozo que la crisis económica, que Etchevarren junto con Macri y Vidal lograran que haga estragos en el pueblo argentino.
Escondiendo a Macri
El local partidario de Juntos por el Cambio, ya no luce la imagen de Macri, solo se puede ver al jefe comunal con la gobernadora María Eugenia Vidal.
El punto número uno, a nivel estrategia electoral, de los vencedores vencidos de Juntos por el Cambio, es el despegue de la imagen del presidente Macri.
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Tristemente, para Camilo Etchevarren, esto es imposible. Cada foto y encuentro con el presidente dejó abrazos y sonrisas, en medio de una ciudad herida por la pobreza y el desempleo.
Frente de Todos Dolores
Por otro lado y en la vereda de enfrente, Facundo Celasco, con el respaldo total del peronismo se muestra confiado y con fuerzas para revertir los números de las PASO 2019.
La mínima diferencia a favor de Juntos por el Cambio que dejó el escrutinio final, es insignificante frente a la ola que está pronta a llegar a Dolores, y etchevarren es consciente de esto.
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Este es el punto más crucial del temor del jefe comunal. Debilitado el oficialismo, se afianza la fuerza de Facundo Celasco, de cara a las generales de octubre.
Con la sumatoria de los votos en blanco, fundamentales en octubre, y las divergencias dentro del macrismo, la segunda elección de el Frente de Todos sumará el caudal necesario para dar el punto final a la gestión de etchevarren.
En definitiva, la realidad de Dolores nos ofrece una gestión agotada con un mandatario derrotado; frente a un proyecto superador con un candidato sólido. Sobre estas razones de base opera el “efecto avalancha”. No se basta por sí mismo. Actúa sobre estas causas que ya existían, brinda un empujoncito, un envión adicional para llegar a la meta.
Alineación y caudal de votos
La evidente conveniencia de alinear Nación, Provincia y Municipio bajo un mismo signo político, junto con la presencia de un buen dirigente político como Facundo Celasco, hará realidad el deseo del pueblo dolorense de ser dirigido por un ciudadano común.
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El beneficio de esta triple alineación para los ciudadanos de Dolores se hace más visible si consideramos que el foco de esas gestiones estará puesto en la educación, la vivienda, el trabajo, la salud, es decir, en mejorarles la vida a todos los habitantes en el marco de un proyecto de desarrollo, que debería ser siempre el objetivo de la política, aunque sabemos que muchas veces no lo es.