Emilio Monzó: «Mi ilusión es que ni Mauricio Macri ni Cristina Kirchner sean actores relevantes en 2023»
Después de 16 años en la función pública, Emilio Monzó vuelve al llano. Lo que no significa que vaya a renunciar a la política, muy por el contrario: el jueves pasado, el todavía presidente de la Cámara de Diputados fue el principal orador en un acto de tono peronista en Florencio Varela.
Lo acompañó Rogelio Frigerio, junto a una decena de dirigentes que, como él, cuestionan al macrismo ortodoxo, sostienen que Juntos por el Cambio debe dar lugar a nuevos liderazgos que excedan el de Mauricio Macri y afirman que hay que colaborar con el gobierno de Alberto Fernández para «cerrar la grieta».
«Mi ilusión, además de terminar con la grieta en la Argentina, es que ni Macri ni Cristina Kirchner sean los actores relevantes en 2023. Que haya un cambio de generación, que podamos ver en una contienda electoral a Horacio Rodríguez Larreta, a Martín Lousteau, a Alfredo Cornejo, a Sergio Massa, a Axel Kicillof y a otros tantos que, como ellos, son de una nueva generación política, que tienen experiencia en el Estado y están preparados. Ese sería el verdadero cambio y el final de la grieta», asevera Monzó en diálogo con LA NACION.
El todavía presidente de la Cámara de Diputados encabezó un acto en Florencio Varela (en el que el invitado estelar fue Rogelio Frigerio) con dirigentes de la Tercera Sección, la zona de la provincia donde el macrismo nunca pudo hacer pie.
El acto organizado por el senador bonaerense Eduardo «Rulo» Schiavo marcó el regreso de Monzó a la provincia después de cuatro años, en los que se corrió del territorio bonaerense por su pelea con María Eugenia Vidal. Se dio el gusto de volver antes de que su rival termine su mandato como gobernadora.
La idea de Monzó y su entorno es rearmar su estructura política en la provincia sumando a los heridos del macrismo y a los sectores del peronismo que no se sumaron al Frente de Todos, aunque sin confrontar todavía con el que será el oficialismo bonaerense y nacional.
En su discurso en Varela, el presidente de la Cámara de Diputados dio indicios claros de cómo intentará posicionarse en el nuevo escenario político. Será con un fuerte mensaje anti «grieta», una posición que siempre tuvo dentro de Cambiemos pero que quedó perdió claramente la batalla contra la idea de Mauricio Macri y Marcos Peña de forzar a fondo la polarización.
«Voy a caminar la Provincia para promover el diálogo y el consenso. Este no es tiempo de candidaturas, es tiempo de trabajar para cerrar la grieta entre los argentinos«, arengó Monzó en el club Nahuel de Varela. «Mi sueño es que una nueva generación política gobierne el país desde 2023 y termine con las confrontaciones que nos han lastimado tanto», agregó.
Monzó también valoró a dirigentes del peronismo como Omar Perotti y Sergio Uñac, y mencionó particularmente a los macristas Horacio Rodríguez Larreta y Néstor Grindetti. «Pueden liderar el futuro de la Argentina desde los consensos, el pluralismo y el diálogo», aseguró.
Antes de su discurso anti confrontación, «Rulo» Schiavo fue el encargado de ponerle picante a la tarde. El senador festejó «el fin del cepo político en la provincia de Buenos Aires» y le apuntó directo a Vidal: llamó a tener en 2023 «un candidato bonaerense y dejar de importar dirigentes porteños para gobernar la Provincia».
Además de Frigerio, en el acto también estuvieron los dirigentes del monzoísmo Nicolás Massot, Sebastián García De Luca, Guillermo Bardón, Marcelo Daletto y Gabriel Monzó. También sobresalió la presencia del periodista Fernando Niembro.