La gran mayoría de los habitantes de la provincia de Buenos Aires se manifestaron a favor de la organización de un debate entre los candidatos a senadores nacionales por ese distrito, aunque admiten que esa discusión pública no les cambiará su intención de voto.
«La noticia acerca de la posibilidad de realizar un debate entre senadores ha tenido un razonable impacto en los electores«, destacó un estudio de opinión de la consultora González y Valladares.
El 51% de los 1.000 bonaerenses entrevistados telefónicamente están al tanto de que se pretende montar un cruce entre Esteban Bullrich, Cristina de Kirchner, Sergio Massa, Florencio Randazzo y Néstor Pitrola.
Lo que lo rechazan con muy pocos. Mayoritariamente prefieren que se realice sin anteponer condiciones. Solo 14% señaló que «le da lo mismo» que se haga o no y apenas 5% consideró que «no debería» realizarse.
Sin embargo, la misma encuesta reveló que al 76% de las personas aseguraron que el debate no les va a cambiar su intención de voto. Entre los votantes de Bullrich ese nivel de decisión tomada llega al 83%. Un 16% de los entrevistados refiere que sí podría influirle y 7% no está seguro que sea capaz de cimbrar su voluntad.
• Sin condicionamientos
Los seguidores de Bullrich, Massa, Randazzo y Pitrola manifestaron altísimas adhesiones a la preferencia de que haya un debate «sin condicionamientos», que van del 83% al 93%. Poco más de un tercio de los electores del kirchnerismo aseguraron que es mejor debatir «bajo ciertas condiciones».
«La actitud más valorada es la de asistir al debate sin imponer condiciones. Los candidatos que la acepten son mayoritariamente valorados como valientes, antes que como oportunistas necesitados de votos», resaltó el informe de los consultores Federico González y Cecilia Valladares al que tuvo acceso ámbito.com.
A los que pretenden imponer algún tipo de condicionamiento de los considera «vuelteros» antes que «serios».
En este marco, el 47% de los entrevistados creen que habrá algún faltazo a la cita, mientras que el 40% consideró que no se hará por «falta de acuerdo» entre los participantes. «La expectativa mayoritaria es que el debate se realizará, aunque no con todos los candidatos. No obstante una considerable porción de los entrevistados descree de que finalmente el debate se lleve a cabo», afirmó el reporte.
• Temas
Los temas de mayor interés a escuchar son la inseguridad, la corrupción política, la inflación, la economía y el desempleo. «No obstante, dicho interés se presenta variable conforme a la intención de votar a uno u otro candidato», aclaran los especialistas.
Es que los seguidores de Cristina se mostraron más a favor de poner sobre la mesa temas vinculados al «ajuste» y la «crisis económica» (inflación, desempleo, pobreza), como ella los define. En tanto, los fanáticos de Bullrich y el oficialismo quieren escuchar sobre careos sobre hechos de corrupción. Los votantes de Massa se inclinan por conocer medidas y propuestas para terminar con la inseguridad.
• Menos confrontación
En caso de enfrentarse en un cara a cara, todos los encuestados recomendaros a sus líderes políticos asumir desde el atril un tono argumentativo y emocional «confrontativo en las ideas, pero amigable en los modos».
Al mismo tiempo, les aconsejan que el contenido del debate esté centrado en las «propuestas y proyectos concretos» que realizarían si llegan al Senado, en detrimento de las «definiciones políticas de cada uno».
«La combinación entre confrontación de ideas y amigabilidad en los modos prevalece sobre el resto. A nivel de detalle, el tono confrontativo prevalece sobre el conciliador y el amigable sobre el pasional», destacó el trabajo estadístico. Y agregó: «El estilo de debate centrado en las propuestas prevalece claramente respecto de aquel que solo pone el énfasis sobre definiciones políticas».
• TN o universidad
Si se hace, el 81% prometió que lo verá, ya sea en directo por televisión o streaming. La señal de noticias del cable TN logró que cuatro de los cinco postulantes firmen un acta de compromiso para debatir en esa pantalla. La única que por ahora rechaza ir a los estudios del Grupo Clarín es Cristina. En el desagregado por partidarios, casi todos los kirchneristas dijeron que si se hace lo van a ver, mientras que en Cambiemos lo va a seguir minuto a minuto tres de cada cuatro.
Bullrich dijo la semana pasada «ojalá haya debate entre los cinco candidatos de la provincia, el debate es una linda herramienta para que se conozcan en profundidad los candidatos». Para el 47% de los consultados esa frase no influye para nada en la realización de la presentación.
A su turno, Cristina aseveró que el debate es importante, pero exigió hacerlo en ámbitos académicos públicos. «Tenemos que debatir pero no en empresas privadas; el ámbito debe ser nuestras universidades. Debatir en canales de televisión está alejado de la sociedad». El 38% está en contra, el 35% a favor y para el 24% no es influyen la opinión de la exmandataria. Al menos ocho casas de altos estudios ya se ofrecieron e invitaron a todos los candidatos.
Massa pidió un debate público «cuando sea y donde sea» y dividió las aguas: 42,6% lo apoyan y 42,3% minimizan sus dichos. Randazzo dijo que «hay que dejarse de joder y debatir de cara a la sociedad siempre, en cualquier lugar, donde sea». El 44% coindice con el exministro.