El gobierno de Mauricio Macri publicó hoy en el Boletín Oficial el decreto 1253/2016, que establece la eximición del pago del impuesto a las Ganancias al medio aguinaldo de diciembre, hasta un límite de 15.000 pesos de bolsillo, lo que equivale a un sueldo promedio mensual de 35.000 pesos bruto.
Entre los considerandos de la resolución, se aclara que "se considera apropiado aliviar la carga tributaria, en este caso la producida por el segundo Sueldo Anual Complementario del año 2016 que percibirán los trabajadores en relación de dependencia y jubilados con determinados niveles de ingresos".
El proyecto de reforma de Ganancias que se aprobó en Diputados no consiguió las nueve firmas necesarias para avanzar y ser tratado en el Senado, como pretendía gran parte de la oposición. El Gobierno consiguió, al menos, posponerlo una semana para poder convencer a los gobernadores con sus argumentos sobre los efectos que, aducen, tendría para las provincias.
En tanto, el bloque del FpV-PJ le habría ofrecido una puerta de salida al Estado mediante una convocatoria para una mesa de diálogo con legisladores, gobernadores y sindicalistas, aunque con fecha de vencimiento. Según trascendidos, si el gobierno rechaza el convite del peronismo la posibilidad de que se firme el dictamen que vino de Diputados crece de manera exponencial y dejarlo listo para que la próxima semana se convierta en ley.
Durante la reunión en la Comisión de Presupuesto, que conduce el senador del FPV Juan Manuel Abal Medina, hubo varios oradores a favor y en contra de estas modificaciones.
Cinco gobernadores cuestionaron el proyecto opositor con el argumento de que su sanción desfinanciaría a las provincias y sólo uno, el chubutense Mario Das Neves, se pronunció a favor. "Este Gobierno dialogó mucho pero llegó el momento de las concesiones. Al 50 por ciento de los trabajadores les impacta este impuesto de una manera contundente", recalcó Das Neves.
La CGT también estuvo presente en la reunión. Carlos Acuña, uno de los integrantes del triunvirato que conduce a la central gremial, aseguró que “apoyamos el dictamen que salió de diputados para empezar a recorrer un camino distinto. Ahora hay chicanas a los gobernadores diciendo que les van a recortar dinero y chicanas de los gobernadores. Tuvieron más de un año para estudiar y organizar de qué forma no desfinanciarse y terminar con un impuesto que no corresponde", dijo.
Por su parte, Héctor Daer, otro miembro del triunvirato de la central gremial, recordó que "el compromiso del Gobierno con la CGT era que en marzo este proyecto de reforma iba a entrar a Diputados y no fue así".
