La Cámara alta avanzará esta semana con el debate de un proyecto de ley
para modificar el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, aunque
está por verse si será puesta a consideración la iniciativa que llegó de
Diputados o la que el gobierno nacional comenzó a delinear con la CGT,
parlamentarios de todos los bloques y los gobernadores.
La discusión se dará en medio de un cruce dentro del bloque del
Frente para la Victoria (FPV) del Senado, donde algunos legisladores
cercanos a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner cuestionaron
duramente al jefe de la bancada, el rionegrino Miguel Angel Pichetto.
Los senadores, que en su mayoría ingresaron el año pasado al Congreso y
varios de ellos militan en La Cámpora, sugirieron que Pichetto salvó al
gobierno de Mauricio Macri de una dura derrota parlamentaria a través de un
"acuerdo en las sombras", como afirmaron a través de las redes sociales. El
senador rionegrino rechazó categóricamente las acusaciones.
No obstante, un sector del bloque del FPV se mantendrá firme en su
intención de no apoyar nada de lo que envíe el gobierno de Macri.
Así lo anunciaron durante la semana senadores como el neuquino Marcelo
Fuentes, la chubutense Nanci González, la santafesina Marilin Sacnum, la
correntina Ana Almirón y la mendocina Anabel Fernández Sagasti. Ese grupo, al que se sumaron otros siete legisladores, se mostró en desacuerdo con las negociaciones entre la cúpula de su bloque y los funcionarios del Poder Ejecutivo.
El pedido surgió luego de que el proyecto aprobado en Diputados, redactado
entre los ex funcionarios kirchneristas Sergio Massa, Diego Bossio y Axel
Kicillof, fue rechazado por gobernadores de todas las bancadas que les
hicieron sentir su presión a algunos legisladores, quienes luego se negaron
a firmar el dictamen de la oposición.
Hasta el viernes, el expediente sólo tenía cuatro firmas. Por ello, el
miércoles pasado el FPV anunció el reemplazo en el seno de la Comisión de
Presupuesto del correntino Carlos Espínola y del misionero Juan Irrazábal
por el formoseño José Mayans y el tucumano José Alperovich.
Pero ni siquiera ese cambio, que aún debe ser ratificado por la presidenta
del Senado, Gabriela Michetti, le da las rúbricas necesarias al proyecto
para presentarlo en el recinto. La negociación abierta con el gobierno, no obstante, impulsó la idea de la oposición para pedir una preferencia para el próximo miércoles y así debatir los cambios en Ganancias en sesión.
Lo que se sabrá recién la semana próxima es si el Senado tendrá en sus manos una reforma consensuada entre el gobierno, las centrales sindicales, los parlamentarios y los gobernadores o votará tal como está el proyecto de
Diputados, como advirtió Pichetto la semana pasada. Si así lo hiciera, la decisión de vetar la iniciativa o de promulgarla recaerá en el presidente Mauricio Macri.
Algunos de los cuestionamientos pasan por la creación de nuevos impuestos,
especialmente, a la minería. Por ejemplo, la kirchnerista María Labado, de la provincia de Santa Cruz, se negó a estampar su firma en el dictamen original.
En cambio, ante un acuerdo de las partes, el Senado apoyará las
modificaciones y la iniciativa pasará a Diputados que debería aprobarla en
la sesión del 28 de diciembre, tres días antes de que venza el período
extraordinario.
Por ello, la composición del bloque más numeroso del Senado (con 42 senadores) podría desarmarse tras la votación del miércoles si es que se pone a consideración una iniciativa consensuada entre el gobierno, las centrales obreras, los gobernadores y una parte de los legisladores.