Néstor Grindetti y Martín Insaurralde exigen la estatización de EDESUR
En plena embestida de los gobernadores del interior, que buscan que Mauricio Macri les traspase las concesiones de las eléctricas EDENOR y EDESUR, además del manejo de AYSA, a la Provincia de Buenos Aires, el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde y el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, pidieron públicamente la estatización del servicio.
El pedido que encabeza entre otros el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, y el de Salta, Juan Manuel Urtubey, significaría un verdadero problema fiscal para la Provincia, que se tendría que hacer cargo de subsidios por cerca de 90 mil millones de pesos al año, una cifra que no se compensa ni siquiera con el reestablecido Fondo del Conurbano, que implicó este año ingresos por 40 mil millones para Buenos Aires.
Enterada de la jugada, Vidal envió a Manuel Mosca, presidente de la Cámara de Diputados, a buscar consensos en el interior para bloquearla. Mosca logró la adhesión de intendentes del peronismo y de Cambiemos, y se apresta a poner a consideración de la Legislatura una declaración en la que se explicite el rechazo.
La buena noticia es que, en paralelo, surgieron voces en el Conurbano. Y con una apuesta bastante más fuerte. Se trata del intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, que se sumó hoy a un pedido que ya había hecho su par de Lanús, Néstor Grindetti, de Cambiemos: la estatización de EDESUR.
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El intendente de Lomas de Zamora dijo que “la compañía brinda un servicio ineficiente” y habló de “innumerable cantidad de cortes todos los días en los barrios del Municipio y el resto de la Provincia”. “La luz es un servicio público esencial que representa salud, seguridad y calidad de vida. Es el momento de dar el debate de la estatización para proteger a los usuarios”, indicó.
Además, cuestionó que “el Estado autoriza aumentos millonarios, pero la calidad de la prestación es cada vez peor”. En este sentido, pidió “poner el foco en el servicio que ofrecen Edesur y las demás compañías a 17 millones de bonaerenses, no en la rentabilidad de las empresas eléctricas”.
Por su parte, Grindetti dijo estar “cansado de las mentiras de Edesur”, al tiempo que reveló que el Municipio estudia pedir la cancelación de la concesión.
No sólo Grindetti e Insaurralde expresaron su hartazgo contra la distribuidora. A lo largo de los últimos meses, desde Andrés Watson, de Florencio Varela, hasta Jorge Ferraresi, de Avellaneda, vienen encabezando reclamos, algunos de ellos en la Justicia, para lograr una respuesta a los reclamos de sus vecinos, que son víctimas de constantes cortes de luz.