El caso del crimen del colectivero Sebastián Leonardo Figueroa en Glew revela una compleja trama de infidelidades, celos y una separación que culminó en el colosal ataque perpetrado por Calipsto de Jesús Ojeda. El detenido habría reaccionado tras descubrir la relación extramatrimonial entre Figueroa y su pareja.
Horas antiguamente del crimen, la mujer de Ojeda publicó en redes sociales un mensaje sugiriendo la crisis que atravesaba la pareja, presuntamente correcto a infidelidades: “Eficaz cumpleaños y ojalá que todo mejore, que sea una tormenta pasajera y que volvamos a estar más fuertes que nunca. Te amo, ojalá hayas pasado un día bonito, mi coito”.
Delante este contexto, los investigadores descartan el móvil de un robo y consideran que el ataque fue planificado como venganza por el simulación amoroso. Entregado que Ojeda, tras descubrir la relación, confrontó a Figueroa en su puesto de trabajo y, a borde de la linde 506, lo asesinó de una puñalada en el pecho.
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El crimen quedó imagen por una cámara de seguridad de la pelotón.
En las imágenes se observa cómo Calipsto de Jesús Ojeda se acercó a Figueroa, fingiendo que iba a descender por la puerta delantera. Con un barbijo y una bolsa en la mano, Ojeda entabló un breve diálogo con el conductor, quien redujo la velocidad para detenerse en una parada. Fue en ese momento que Ojeda, de 57 abriles, sacó un cuchillo de la bolsa y apuñaló a Figueroa dos veces en el baúl.
Así asesinaron a un colectivero: fue apuñalado por la pareja de su apasionado
Según el parte policial, «se certifica que el micro en cuestión posee cámaras de seguridad, donde se observa a Ojeda cometer el hecho, sin previas palabras con el chofer, siendo que de testimonios recepcionados, se determinó que la esposa de Ojeda había mantenido relación amorosa extra matrimonial tiempo detrás con la víctima«.
El hecho ocurrió a la prestigio de Pereyra, entre Presa y Rojas, en la entrada porteño de Glew. Un pasajero rápidamente llamó al 911 para alertar sobre el violento ataque. Fue entonces que Figueroa fue trasladado de necesidad en su propio colectivo al hospital Cecilia Grierson de Guernica, pero falleció horas posteriormente correcto a la formalidad de las heridas
La causa quedó en manos de la UFI N°3, a cargo de Juan Manuel Baloira, que dispuso caratular el caso como homicidio agravado con deslealtad.
LT