El presidente Alberto Fernández firmó este domingo el primer decreto del año, por el que promulgó la recientemente sancionada ley de Movilidad jubilatoria, que actualizará trimestralmente las jubilaciones, pensiones y otros beneficios previsionales de acuerdo con una fórmula que combina en partes iguales la evolución de la recaudación y los salarios.
El acto tuvo lugar en Chapadmalal, cerca de Mar del Plata, en el lanzamiento de la campaña «ANSeS verano», junto a la titular del organismo, Fernanda Raverta, y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof.
Fernández destacó que el decreto 1/21 es «para los jubilados», en el marco del propósito de su Gobierno de «prestarle atención a los que más necesitan», al tiempo que reconoció que «los que peor estaban en el 2020 eran los jubilados».
«No creemos que ningún jubilado esté muy bien con los ingresos que tienen», aseguró el presidente, luego de un año en el que se suspendió la vigencia de la anterior ley de Movilidad, sancionada en diciembre de 2017, con la aplicación de aumentos por decreto que fueron objetados por diferentes especialistas en materia previsional.
El primer mandatario remarcó que la movilidad jubilatoria ya promulgda les va a permitir a los jubilados estar «un poco mejor» porque, aseguró, hará crecer los ingresos de los trabajadores pasivos.
En ese sentido, Fernández indicó que el Estado hace un «esfuerzo fiscal importante» con la nueva fórmula, pero se trata de «estar presentes» para resolver las «inequidades» del país.
Asimismo, dijo que que «el Estado está para ordenar» porque «el mercado desordena» y suele permitir que «el más fuerte se beneficie».
El jefe de Estado permanece en la residencia presidencial de esa localidad, ubicada sobre la ruta interbalnearia 11 entre Mar del Plata y Miramar, donde recibió el Año Nuevo acompañado por Kicillof y sus respectivas familias.
