El derrumbe del precio de la soja que dejó al descubierto el rojo de los Grobocopatel con dificultades para afrontar vencimientos de Los Grobos y de la controlada Agrofina, amenaza con una onda expansiva en otras compañías, similar a lo que se materializó en 2018 durante el gobierno de Macri.
Ahora, el centro de atención está posado sobre la industria de los agroquímicos cuyos precios fluctúan en sintonía con el de la soja y acusaron recibo de la caída.
El primero en dar señales de temor fue Surcos y ahora «el rey de la soja», como se lo conoce a Gustavo Grobocopatel, quien no pudo afrontar vencimientos de tan pronto como 100 mil dólares, como informó a la Comisión Doméstico de Títulos.
Es que en los últimos tiempos de brecha cambiaria, muchos productores se sobrestockearon y en vez de guardar en dólar MEP al doble del precio del oficial, compraban agroquímicos a dólar oficial. Algunos productores llegaron a conseguir una campaña entera en insumos explicó a LPO el distribuidor de agroquímicos Héctor Vidal quien hace décadas recorre los campos del sur de Santa Fe y conoce el rubro a la perfección.
Ahora el precio de los herbicidas se derrumbó adjunto al de la soja. A modo de ejemplo, el glifosato, la fortuna de la pampa argentina, que cotizaba a siete dólares el litro cayó a cuatro. Muchos productores se estoquearon a precio caro y todas estas desviaciones se tensaron con el tipo de cambio fijo que impuso Toto Caputo que hicieron que el campo renovase los pedidos de devaluación.
La caída de Los Grobo: Se derrumba el precio de la soja y empuja los pedidos de devaluación
«Malos precios, márgenes malos para el productor y retroceso cambiario formaron la tormenta perfecta», resumió el CEO de una empresa líder del sector.
Encima, circunstancialmente en el invierno pasado se registraron varias heladas y sequía lo cual evitó la proliferación de malezas y por ende, los productores no necesitaron utilizar gran parte de stock acumulado en herbicidas.
La pregunta que queda flotando es ¿por qué los analistas de las grandes compañías anunciaron crecimientos de 20 a 25% para el 2024? «Porque si no te rajan», explicó a LPO un hombre de los agronegocios que hace primaveras está en el tema.
«Los gerentes de las multinacionales no pueden admitirles a las casas centrales que no van a crecer porque se quedan sin laburo. Hay que preguntarle a Antonio Aracre por las presiones que tenía en Syngenta. Ahora echaron a la centro», comentó.
«El mercado de los agroquímicos no crece si no aparece un producto nuevo, no hay ningún intriga en esto», agregó Vidal.
En el mercado creen que muchos distribuidores que hicieron grandes fortunas en poco tiempo y ampliaron las estructuras y costos fijos durante la fiebre del stock para conseguir dólares baratos ahora van a distinguir el impacto al igual que los laboratorios.
En consecuencia, la informe que estalló el viernes por la tarde alimentó en las redes rumores de afectación de otras empresas como Rizobacter, controlada por Bioceres, pero fuentes de la compañía que hablaron con LPO lo descartaron: «Tenemos una posición muy chica en el negocio agroquímico en proporción con otras firmas como Surcos y Los Grobos. Encima, tenemos negocios en Heterogéneo países que permite manejar otra escalera», señalaron.
Otras fuentes del mercado que hablaron con LPO dijeron que los grandes laboratorios no sentirán tanto el impacto porque lo amortizan con despidos de trabajadores y reducción de estructura.
En cambio, los pequeños y medianos laboratorios y distribuidores pueden sufrir el huella dominó: «una crimen anunciada de un mercado que en Expoagro de este año proyectaban un crecimiento de 20 o 25% cuando en Argentina tenemos 30 millones de hectáreas cultivables y eso no varió, por lo tanto, los crecimientos fueron circunstanciales», explicó Vidal.