La Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) decidió ajustar nuevamente la tasa de interés de referencia para contener la suba de los precios. En junio alcanzó el 9,1% interanual, la cifra más alta en 40 años.
La suba de su tasa de interés de referencia será de 75 o 100 puntos básicos, en la búsqueda de emitir señales destinadas a tener un control efectivo de la inflación, en su última reunión previa al receso estival. Se terminará de definir este miércoles, durante la reunión del Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC) que inició este martes.
Los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania impulsó la suba de los precios, especialmente a los vinculados a la energía. La inflación se convirtió en una cuestión a resolver para varios organismos del mundo, como el FMI, que en su último informe pidió a los líderes mundiales controlar ese fenómeno.
La tasa de referencia de los Estados Unidos es el rendimiento que globalmente se conoce como “libre de riesgo”, dado el historial favorable del Tesoro estadounidense en materia de cumplimiento de sus obligaciones.
El indicador de riesgo país mide precisamente la diferencia entre esa tasa y la que pagan las diferentes naciones del mundo para emitir deuda.
Es probable la decisión del FOMC no se alcance por unanimidad ya que hay miembros que quieren mostrar al mercado que el organismo quiere neutralizar la inflación. Vario han manifestado su preferencia por ajustar la tasa en 100 pb aunque otros se inclinaron por un ajuste menor, dado el riesgo de llevar a la economía a un ciclo recesivo.
La decisión del FOMC se produce cuando la economía está mostrando datos dispares. Por un lado, el mercado laboral, si bien muestra una tensión salarial y un aumento de pedidos de subsidios al desempleo, por otro lado, evidencia que existen casi 10 millones de puestos de trabajo disponible, lo que demuestra la necesidad de un mayor dinamismo económico.
Las estimaciones de las FED regionales anticipan que el PBI caerá por segundo trimestre consecutivo, lo que llevaría a considerar que la economía entró en recesión, de acuerdo con la gran mayoría de los académicos, aunque no, para la Casa Blanca.
Otro elemento a tener en cuenta es que decisión adoptará la FED respecto de la devolución de los títulos e hipotecas que el organismo rescató de los bancos y que empezó a devolver para mejorar su balance que presenta un rojo de 9 billones de dólares.
La FED devolvió a los bancos unos 35.000 millones de dólares en bonos del Tesoro y unos 17.500 millones de dólares en hipotecas, y la duda es si seguirá a ese ritmo.
El FOMC probablemente reconocerá cierta desaceleración en la economía, tal como quedó expuesto en la última edición del Libro Beige aunque probablemente dirá que la economía no está actualmente en recesión y que los balances de los hogares siguen siendo fuertes.
El mercado también estará pendiente de la conferencia de prensa posterior a la reunión donde Powell podría dar alguna señal de la evolución de la inflación durante el final del verano, habida cuenta de la caída en el precio del petróleo, la liberación de más reservas estratégicas de crudo para bajar los precios de los combustibles y reducir los riesgos de una eventual recesión.
La decisión de subir la tasa de referencia puede impactar sobre los países emergentes como la Argentina porque el objetivo es fortalecer al dólar por sobre el resto de las monedas, de manera que las divisas de economías más frágiles tienden a debilitarse.