Sin dudas las redes sociales fueron un eje central en esta última etapa de la campaña de cara al balotaje.
Ciudadanos interesados en ser parte de este hito histórico político, en el que por primera vez se elegirá a un presidente argentino tras un balotaje, el ingenio pudo con todo y las redes sociales no quedaron afuera y se utilizaron como plataforma para poner el foco en esta campaña.
A través de este tejido es que se formaron varios grupos y como consecuencia se hicieron diversos encuentros. Por estas horas -en las que la campaña se mide minuto a minutos- miles de personas se convocaron a través de Facebook, twitter y en minoría, por whatsapp, se reúnen en plazas del país, o simplemente caminan casa por casa, timbre a timbre, realizan reuniones con los vecinos; charlan, militan, politizan.
Los candidatos a presidentes por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli, y por Cambiemos, Mauricio Macri, supieron con sus equipos de comunicación hacer eje en las redes y también fueron utilizadas desde su perfiles.
Hoy, para el cierre de la campaña,, los candidatos propusieron un hashtag #MejorScioli y desde el lado opositor indicaron se tuitee o suban comentarios a Facebook con estas dos frases: #YoCambio #MacriPresidente
Pero muy a pesar de lo que quisieron mostrar los medios de comunicación, la gente salió a la calle, sin peleas mostró su posición y ahora, que quedan horas para continuar, apenas tres días de un mes que fue intenso, el flujo de información no cesa.
Lo más notorio de esa comunicación fue que la gente volvió a la calle a hablar con el otro y si bien la red sirvió para tejer lazos, el fruto se vio en 3D. Lo virtual se convirtió en real, tangible. Hubo artistas en trenes, subtes, colectivos. Comerciantes creativos que no disimularon su simpatía por un político u otro; diseñadores que compartieron su creatividad; editores de video; dentistas que contaron sus artimañas para hablar de política con sus pacientes. Y así se sucedió este mes de una campaña desbordante de ideas.
Hoy y aún por estas horas, en distintos lugares del país hay quienes siguen caminando la calle, concentrándose: están los vecinos de Villa María en Córdoba a puro baile en una plaza. También están aquellos que caminan la calle a pesar de lluvia en Santa Fe, Cañada de Gómez; otros hacen lo suyo volanteando en la peatonal Laprida de Lomas de Zamora.
Una chica de secundaria, timbrea en un barrio de Ushuaia y su mamá lo cuenta en uno de los grupos más convocantes con 300.000 seguidores: Resistiendo con aguante (un grupo de Facebook). Y así, como una palabra se concatena a otra, las redes conformaron este gran entramado, que no es más ni menos que otra pata de la campaña política a la que le quedan horas.