Las últimas horas de Jorge Delhon antes de suicidarse
Jorge Alejandro Delhon se suicidó tras ser acusado por Alejandro Burzaco, el ex CEO de la empresa Torneos, de recibir coimas por cuatro millones de dólares.
El abogado vivía en Banfield, sobre la calle Manuel Castro al 1400. A las pocas horas de recibir el impacto de la noticia, Delhon se quitó la vida arrojándose a las vías del Ferrocarril Roca cuando pasaba un tren, a pocos metros de la estación Lanús y a veinte cuadras de su domicilio.
Cuando ocurrió la tragedia, el tren circulaba con destino a Lomas de Zamora, eran cerca de las 19.30, y el hecho ocurrió en la intersección de las calles 29 de Septiembre y Oncativo, lugar no habilitado para el paso peatonal.
Su nombre y su fotografía comenzaron a aparecer en los medios alrededor de las 18 de ese fatídico martes. Poco tiempo después, Delhon se comunicó telefónicamente con Pablo Paladino, el ex coordinador del programa Fútbol para Todos.
Los dos acusados por Burzaco mantenían una gran amistad, más allá de que uno era hincha de Banfield (Delhon) y el otro de Los Andes (Paladino).
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El ex funcionario le ofreció reunirse en su casa para conversar sobre la acusación que los perjudicaba. Paladino lo esperaba, pero su amigo nunca llegó: tomó la decisión de quitarse la vida.
El abogado de 52 años (casado y padre de cuatro hijos) había sido contratado por la Jefatura de Gabinete en 2012 por recomendación de su amigo Paladino y abandonó la función pública tres años después.
«Era un hombre honesto, derecho, de familia. Un abogado y asesor administrativo sin relación con la política. Es incomprensible. El martes hablé con él telefónicamente para tranquilizarlo. Era un amigo entrañable y le dije que viniera a mi casa para hablar. Era un hombre intachable que no entendía verse involucrado en esta situación. No lo pudo soportar», declaró Paladino en su raid mediático buscando defenderse de la dura acusación.
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La comunicación fue minutos después de las 18, contó el ex coordinador del FpT. Antes de las 20, Delhon ya se había suicidado en las vías del Roca.
«Lo esperé en mi casa y nunca llegó. Lo llamé mil veces… Las noticias salieron a las 18 y yo lo cité para las 18.30; esto pasó a las 19 o 19 y pico», agregó. «Yo lo llamé para explicarle que esto forma parte de la pelea contra el poder real, algo que él nunca pudo entender. Habrá visto sus fotos publicadas y no lo pudo soportar».
«Era un tipo honesto ─siguió─ que viajaba en tren todos los días hacia su estudio jurídico en Capital. Tenía cuatro hijos jóvenes. Habrá pensado en ellos y en toda su familia cuando escuchó que lo acusaban de coimero. No pudo tolerar una denuncia semejante».
El momento del hecho
Vecinos de la estación Lanús afirmaron: «No es la primera vez que alguien se tira en este sector. Parece como que es el indicado para el paso previo a la muerte».
«El hombre estaba muy bien vestido. Eso fue lo que me sorprendió», le confirmó otro vecino ─quien no quiso decir su nombre─ a Clarín. Pero aseguró que estaba en el lugar cuando sucedió el trágico hecho.
Según los testigos que circulaban por los alrededores, el hombre fue caminando lentamente, atravesó la parte del muro que no tenía contención (y luego fue precintada con fajas amarillas) hasta tirarse a las vías cuando llegaba un tren.
La autopsia se realizó ayer por la mañana en la morgue judicial de Lomas de Zamora, según confirmaron fuentes judiciales.
Entre los puntos salientes de la pericia ordenada por el fiscal Gastón Fernández, figuró la extracción de sangre y de tejidos para determinar si en el momento de la trágica decisión Delhon, estaba bajo efectos de alguna droga o medicamentos tranquilizantes y/o dopantes.
Además, el fiscal solicitó los registros de las cámaras de seguridad de la zona para tratar de determinar si estaba solo en el momento en el que el abogado se arrojó a las vías.
También incluyó la revisión de las cámaras instaladas en el trayecto que va desde la casa de Delhon y la de Paladino para establecer si alguna persona lo acompañaba. El fiscal quiere corroborar fehacientemente que nadie obligó a Delhon a suicidarse.
El testimonio del motorman
Al escuchar las bocinas del tren en reiteradas ocasiones y el alboroto que se produjo después, muchos vecinos salieron a observar qué estaba sucediendo sin saber de quien se trataba el personaje, ni el hecho en el que estaba involucrado. Los primeros en llegar llamaron al 911 para denunciar la emergencia.
El hombre llevaba un papel en la mano escrito de puño y letra en el que decía: «Los amo, no puedo creer». Las conclusiones sacadas por los investigadores confirmarían que tomó la decisión por «el honor» de su familia.
En su declaración ante el fiscal, el motorman (el maquinista que estaba conduciendo el tren número 3251 y cuya identidad no se dio a conocer) afirmó que vio a «una persona que apareció de golpe, en el medio de la noche, corriendo hacia hacia la formación que de repente se arrojó a las vías».
También agregó que «a pesar de recurrir al freno de emergencia, no pude evitar el arrollamiento».
El suceso que describió el maquinista quedó registrado por la cámara instalada en la formación. La filmación del tren corroboró la versión aportada por el motorman.
Esas imágenes, fueron secuestradas por el fiscal Fernández, quien se presentó en el lugar del hecho y supervisó personalmente el levantamiento de las pruebas.
El maquinista también agregó que no vio a ninguna otra persona. Solo a Delhon.
