Vecinos de Lomas de Zamora denuncian el avance inmobiliario y acusan al Municipio
Vecinos de la calle Sixto Fernández al 300, en pleno centro de Lomas de Zamora, se encuentran en estado de alerta ante el avance inmobiliario al asegurar que “destruye” al barrio y lo transforma en “un conjunto de bares y torres de edificios”.
A raíz de la explosión que se dio en la zona de Las Lomitas, donde se abren locales nuevos todas las semanas, cada vez son más quienes se suman. En este caso, los vecinos agrupados en “Sixto, La Frontera” se manifiestan para rechazar la apertura de nuevos negocios gastronómicos y la instalación de un gran estacionamiento con complicidad del Municipio de Lomas de Zamora.
Desde hace cuatro años vienen presentando reclamos ante el municipio por la instalación de negocios y edificios, que ocasionó que una gran cantidad de gente se mude a la zona. Aseguran que les deterioró “la calidad de vida” porque “se acumula gran cantidad de basura, hay muchos cortes de luz, baja presión de agua y un gran movimiento de gente que antes no existía”.
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Ahora el reclamo llegó a su punto más alto a partir de los avances en el proyecto inmobiliario “Lomitas Street”, un paseo con una torre de 22 pisos, más de 50 locales comerciales y restaurantes, que pretende tener una salida sobre la calle Sixto Fernández.
Exigen, en ese sentido, que se realice un estudio de impacto ambiental porque “la construcción generará importantes movimientos en el suelo y muchas de las casas que lo rodean son casi centenarias”. “¿Respeta el proyecto los espacios verdes. Es un desarrollo sustentable?”, se preguntan.
La transformación del barrio, denuncian, destruyó su identidad. “Arrasaron con la arboleda pública, demolieron casas, comenzaron a desaparecer pulmones de manzana, se perdió la privacidad (dado que estamos rodeados de ventanas de las torres cercanas), perdimos también la posibilidad de disfrutar de percibir los aromas de las plantas, ahora el olor a frito y de parrillas humeantes se inicia a la mañana temprano hasta la madrugada. No olvidemos la basura: la prolijidad y el respeto por los espacios públicos no caracteriza a los comercios. Ante la falta de higiene, la basura que se acumula además de generar olores insoportables trajo ratas e insectos”, enumeraron en un documento dirigido al Concejo Deliberante del distrito.
El grupo se autodenomina “Sixto, la Frontera” porque de un lado de la calle es una zona residencial de baja densidad que, según la zonificación de Lomas de Zamora, “limita el establecimiento de actividades comerciales que generen molestias o perjuicios a los vecinos”, mientras que de la vereda del frente es una zona comercial.
Si bien fueron recibidos por autoridades municipales y se reunieron con ediles del Concejo Deliberante, la respuesta que recibieron es que las construcciones son legales porque justo la calle Sixto Fernández es “la frontera” con el área apta para construir.
