Macri premia con un ascenso al juez que se negó a investigar a River
El presidente Mauricio Macri fue crítico porque la justicia no actúa contra los barras, pero acaba de enviar al Senado el pliego para el ascenso del juez que se negó a investigar a la actual dirigencia de River, argumentando que no había vínculos con la barra.
El 14 de noviembre, Macri envió al Senado el pedido para que el juez Fernando Mario Caunedo sea ascendido a juez de Tribunal Oral, un cargo que tiene rango de camarista. Caunedo procesó en 2016 a Daniel Passarella y al mismo jefe de la barra brava que ahora está en la mira de otro juez, porque le encontraron 300 entradas en su casa.
Es decir, hace dos años, con pruebas similares, el juez procesó al expresidente millonario Passarella y a varios exdirigentes del club de Núñez, pero en esta oportunidad su posición fue diferente y consideró que no había “vinculación con los objetos procesales”.
Caunedo escribió ahora que aquellos hechos no están vinculados con la trunca superfinal del fin de semana porque “abarcan temporalmente un periodo distinto”. Lo que es peor, habría autorizado al jefe de la barra investigado, Héctor «Caverna» Godoy, a viajar a Brasil para ver un partido del club millonario.
Sin embargo Macri, que se mostró indignado con la justicia por la falta de investigaciones, envió el 14 de noviembre el pliego de Caunedo para que fuera ascendido a camarista. La decisión final la tendrá el Senado.
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El fin de semana, varios audios muestran la relación entre la reventa de entradas del jefe de la barra y los episodios violentos que terminaron por frustrar el partido entre River y Boca y que pusieron a la Argentina bajo la lupa, por las graves fallas en los operativos de seguridad.
Es que en paralelo, el Gobierno quiere probar que está en condiciones de garantizar la seguridad de los principales líderes del mundo, que vendrán en días a participar de la cumbre del G20, en Costa Salguero.
Estas idas y venidas entre la justicia, la seguridad y la política terminaron, por ahora, solo con una renuncia, la del ministro de Seguridad porteño, Martín Ocampo.
