Este domingo al cumplirse dos meses de la desaparición de Santiago Maldonado, familiares y amigos del joven, visto por última vez en Chubut el pasado 1 de agosto antes de un operativo de Gendarmería nacional, encabezaron desde las 15:30 una masiva movilización hacia Plaza de Mayo para exigir su aparición con vida, una iniciativa que será replicada en las principales ciudades del país.
Maldonado, de 28 años, desapareció hace exactamente dos meses en Chubut, tras un operativo de Gendarmería Nacional sobre una comunidad mapuche del departamento de Cushamen, que se estaba manifestando sobre la Ruta Nacional 40, en cercanías a la Lof (comunidad) a la que pertenecen.
«Muchas gracias por salir a la calle y no dejarse engañar por los medios, gracias de parte de Santiago y de toda mi familia», fueron las palabras con las que Sergio Maldonado, a dos meses de la desaparición de su hermano, introdujo con emoción a la lectura de una carta dirigida al joven desaparecido.
«Santiago donde estés quiero que sepas que te quiero, cada día que pasa te extraño más», comenzaba el escrito, en el que Maldonado se preguntaba, «¿Por qué sos vos que estás pasando por esto y no yo?», respondiendo él mismo a su pregunta: «Porque vos siempre te involucraste en las causas justas y yo no».
«Es mucha la gente que te quiere sin haberte conocido, es mucha la gente que está acá buscándote en el país y en todos lados», decía Sergio, subrayando el sentimiento de «tristeza e impotencia» que le genera hoy no poder estar junto a su hermano.
Por último, se dirigió a Mauricio Macri y a sus funcionarios, con una pregunta: «a la autoridad máxima de nuestro país, al señor presidente y a todos sus ministros: ¿Dónde está Santiago Maldonado?».
Previamente a la exposición de Sergio, el otro hermano de Santiago, Germán, también había compartido algunas palabras con quienes estaban en la plaza.
«La familia Maldonado no milita en ningún partido político, esto es político desde el inicio, desde que mi hermano desapareció en un operativo de Gendarmería», dijo en uno de los pasajes más destacados de su exposición.
La convocatoria fue acompañada por distintas organizaciones de defensa de los derechos humanos, al igual que el 1º de septiembre pasado, al cumplirse un mes de la desaparición. En esa oportunidad la movilización culminó con violentos incidentes y un total de 31 personas detenidas.
«A dos meses de la desaparición de Santiago Maldonado. ¡Aparición con vida ya!», fue la consigna a través de la que los organizadores, con la familia a la cabeza, convocaron a movilizarse «en todas las plazas del país». Incluso, argentinos que residen en el exterior hicieron circular convocatorias para ciudades como Londres, París, Berlín, Quito o Santiago de Chile.
«Les pedimos a todos que nos acompañen en este reclamo, pacíficamente, evitando provocaciones de algunos sectores que su único objetivo es deslegitimar el reclamo de verdad y justicia», sostiene el comunicado de la familia, que además solicita al Gobierno Nacional que «como principal garante de la seguridad pública, tome los recaudos necesarios para evitar todo hecho de violencia que empañe un pacífico y legítimo reclamo de millones de personas».
Incidentes en la desconcentración
La masiva marcha a la Plaza de Mayo por Santiago Maldonado transcurrió con tranquilidad, pero se vio alterada por un grupo de encapuchados que agredió a periodistas de los canales C5N, canal América y Crónica TV.
Las imágenes de los agresores, que llevaron sus rostros tapados con gorras y anteojos de sol, fueron difundidas en las redes sociales.
La presencia de los agresores generó unas corridas en la desconcentración de la movilización que se realizó a dos meses de la desaparición del artesano. Los encapuchados fueron neutralizados por los propios manifestantes.
La escena se replicó en El Bolsón, donde también hubo una marcha para reclamar la aparición con vida del tatuador.
Los manifestantes, a pesar de estar encapuchados, no querían ser registrados en planos cortos para no ser identificados. Cuando reconocieron a TN, comenzaron forcejeos y terminaron pintando la lente de la cámara con aerosol rojo. También hubo tironeos con la cámara de LA NACION. Gritaban «medios terroristas» y pedían borrar imágenes.
A diferencia de la marcha anterior, cuando hubo piedrazos y bombas molotov, los manifestantes decidieron esta vez que no habría agresiones físicas. A pesar de la tensión con la Gendarmería, el episodio no pasó a mayores.