El Papa Francisco encabezó una nueva misa de Pascua y rompió con la tradición de no pronunciar una homilía durante la misa. Esta vez tomó la palabra y acusó a quienes propagan las guerras. En su discurso, dejó una frase que parece estar dirigida al presidente de los Estados Unidos.
«En medio de tanta calamidad no hay un muro, hay un horizonte. Está la vida». Así, en plena misa de Pascua y a pocos días de la poderosa bomba que Estados Unidos lanzó sobre el territorio afgano, el pontífice volvió a cuestionar, esta vez de manera indirecta, la iniciativa de ataque de Donald Trump.
No es la primera vez que Francisco apunta sobre el magnate. Este mismo mes, en una entrevista publicada por el diario italiano La Repubblica, el Papa sentenció: «El mundo debe detener a los hombres de guerra. Porque los inocentes siempre son los que pagan el precio».
Y amplió: «Pido más fuertemente que haya paz en este mundo dominado por traficantes de armas que se benefician de la sangre de mujeres y hombres. Hoy desafortunadamente estamos enfrentando una terrible guerra mundial fragmentada. No es fácil saber si el mundo de hoy es más o menos violento que antes».
