El rojo primario se disparó con fuerza en junio y su ritmo del primer semestre complicó el objetivo de déficit primario del 2,5% del PBI en 2022, contemplado en el acuerdo con el FMI. En las últimas horas se conoció que la ministra de Economía, Silvina Batakis, acompañará a Alberto Fernández en su gira por Estados Unidos, en donde el mandatario se reunirá con su par Joe Biden el martes 26 de julio en Washington.
La presencia de Batakis funcionará como un gesto de respaldo y compromiso a las metas acordadas con el organismo, en línea con los anuncios de la última semana, mientras que no se descarta la posibilidad de un primer encuentro presencial con Kristalina Georgieva.
Un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) señaló que el rojo primario devengado totalizó entre enero y junio casi $1,4 billones, o 1,9% del PBI. Este resultado fue consecuencia de una caída del 0,4% de los ingresos totales en términos reales, con una escalada de 9,6% en los gastos totales.
El déficit fiscal que consignó OPC no permite sacar conclusiones acerca del potencial cumplimiento de las metas con el FMI del primer semestre, ya que se trata de un cálculo acerca de lo devengado, mientras que la metodología del acuerdo mira el base caja. Sin embargo, como las tendencias entre ambos números suele ser similar, funciona como señal de poca holgadez en el cumplimiento: para LCG, por la estacionalidad de junio, hubo una disparada del rojo en el último mes y el semestre terminó en uno de $892 millones, algo por encima de la meta de $874 millones.
Del trabajo de OPC se desprende que el gasto primario devengado tuvo una expansión del 10,7% por sobre la inflación en el primer semestre. Por el impacto de la guerra en los precios, allí se destacó el crecimiento del 38% real en los subsidios energéticos que alcanzaron los $764.483 millones. También aumentaron las transferencias a las provincias con un alza del 13,1%, los gastos de personal 11% y las prestaciones sociales con 10,1%. Este último punto estuvo influenciado por los bonos a jubilados y trabajadores informales que se pagaron entre mayo y junio.
El organismo pidió una mayor disciplina fiscal a partir del segundo semestre: en su último staff report, el Fondo consignó que el gasto subió 12,8% por encima de la inflación entre enero y junio, por lo que debería existir un recorte de 7,8% real para esta segunda mitad del año. Las primeras declaraciones de Batakis sobre su compromiso con el equilibrio fiscal y los anuncios de la última semana fueron un gesto a los mercados en esa línea.
Por su parte, Georgieva advirtió luego de su primera conversación virtual con Batakis que se necesitan «acciones dolorosas». En Economía no descartan un encuentro entre ambas durante el viaje a Washington para conversar sobre las dificultades de Argentina y el impacto del contexto mundial.
Habrá que esperar para saber si los anuncios recientes serán suficientes para contentar al FMI, ya que estaban todos previstos en el acuerdo original o habían sido recomendaciones del último staff report. Habrá un sistema de caja única para administrar $600.000 millones de organismos descentralizados y los pagos de gastos no estarán por encima de los ingresos proyectados. También se extendió el congelamiento de ingreso de trabajadores a todas las dependencias del Estado, mientras que se puso en marcha la segmentación de subsidios a las tarifas y el revalúo fiscal.
