El sábado, tres jugadores de Monte Grande Rugby Club atropellaron con su camioneta dos motos que estaban estacionadas en el garage del shopping Las Toscas, de Canning.
Un hombre de seguridad que vio la mala maniobra les pidió la documentación del auto, pero los hombres reaccionaron a los golpes.
Tan fuerte le pegaron que este custodio sigue internado en terapia intensiva con conmoción cerebral y una clavícula fracturada.
Los acusados son Jorge Luis Avendaño (26), Tomás Alfonso Oliva (18), y un chico de 16 años. Los dos mayores quedaron detenidos, acusados de intento de homicidio.
Monte Grande Rugby Club
Sobre el tema, el Monte Grande Rugby Club, en donde juegan los 3 jovenes, emitió un comunicado de prensa, en el que explicó: “El Club no tiene opinión alguna de tinte institucional sobre acciones de sus socios fuera del ámbito deportivo, o fuera de la institución misma.
De todas formas, en este tema privado, dejaremos que primero se expida la justicia y recién allí la Comisión Directiva del club tratará el tema y analizará la situación en detalle.
No hemos vivido situaciones de este tipo en nuestros 52 años de vida y queremos manejarnos con respeto y cautela”.
La fiscal de la causa caratuló el caso como intento de homicidio, y por eso siguen detenidos los golpeadores. El tercero es menor de edad, por lo que quedó en libertad.
De todas formas, en este tema privado, dejaremos que primero se expida la justicia y recién allí la Comisión Directiva del club tratará el tema y analizará la situación en detalle. No hemos vivido situaciones de este tipo en nuestros 52 años de vida y queremos manejarnos con respeto y cautela.
Intento de homicidio
La fiscal de la causa caratuló el caso como intento de homicidio, y por eso siguen detenidos los golpeadores.
El tercero es menor de edad, por lo que quedó en libertad.
Ariel Saavedra, supervisor de seguridad del shopping, explicó lo que ocurrió: “Se le pidió los datos a la gente que había hecho una mala maniobra, pero no se puede entender por qué reaccionaron de esta manera.
El chico está internado en terapia intensiva, con conmoción cerebral y la clavícula izquierda fracturada, está estable, pero aún no se sabe si lo van a operar”.
La agresión
La agresión ocurrió el sábado a la noche, cuando se estaba cerrando la parte comercial del shopping y en un momento en el que estaba saliendo un montón de gente.
Los ahora acusados querían estacionar porque iban a ir al cine, que permanecía abierto, como el sector de la comida.
Otro empleado de seguridad que intentó defender a su compañero también resultó golpeado: le pegaron en la cabeza y tuvo que ser atendido en el hospital de Ezeiza por los mareos. “Le pegaron duro también”, dijo Saavedra. Pero enseguida fue dado de alta.