El apoyo de Argentina a la resolución de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que apunta a crear una Comisión que investigue las presuntas violaciones a los derechos humanos cometidas en Israel y la Franja de Gaza, fue considerada hoy como «inaceptable» por el gobierno israelí, lo que volvió a tensionar la relación entre ambos países luego de que el embajador argentino en ese país ratificara la postura del Gobierno nacional.
La posición del Estado hebreo fue dada a conocer esta mañana al embajador argentino en Israel, Sergio Urribarri, en el marco de una reunión que mantuvo con el director general adjunto para América Latina y el Caribe, Modi Ephraim.
Por su parte, Urribarri defendió ante las autoridades de ese país el voto argentino en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, a favor de una investigación sobre posibles abusos de los derechos humanos en Israel y los territorios palestinos, y reiteró el apoyo a la labor de la Comisionada de ese organismo, Michelle Bachelet.
«Más allá de disentir con algunas apreciaciones de las autoridades israelíes, la Argentina espera que pueda interpretarse el verdadero sentido de la acción» de la ONU «en la materia, así como la necesidad de investigar en el Territorio Palestino Ocupado, incluida Jerusalén Oriental, y en Israel, todas las presuntas violaciones del derecho internacional humanitario y todas las presuntas violaciones y abusos del derecho internacional de los derechos humanos, por todos los actores, de conformidad con las normas del derecho internacional», señaló la Cancillería a través de un comunicado en el que dio cuenta de la reunión.
En tanto que la Cancillería israelí informó que durante el encuentro, Ephraim le «aclaró al embajador (Uribarri) que el apoyo de su país a esta resolución sesgada que ignora el terrorismo de Hamas y el disparo de 4.300 misiles contra los ciudadanos de Israel, es algo que Israel considera inaceptable».
El comunicado señaló que el funcionario israelí «agregó que es inconcebible que Argentina, que sufrió graves y dolorosos atentados terroristas de Irán y Hezbollah contra la embajada de Israel y la sede de la comunidad judía (AMIA) en Buenos Aires, no condenara el terrorismo de Hamas y apoyara esta resolución».
«Modi Ephraim señaló que la expectativa de Israel es que el Gobierno de Argentina apoye a Israel en momentos difíciles a la luz de la amistad entre los países a través de los años y la alianza en la lucha contra el terrorismo», concluye el comunicado.
Embajadora «desilusionada» con votación Argentina
Quien también se expresó al respecto, fue la embajadora de Israel en Argentina, Galit Ronen, al afirmar que están «desilusionados» con la votación de Argentina ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
“Creemos que esta resolución no refleja las buenas relaciones que tenemos con Argentina», se quejó la representante del gobierno de Benjamín Netanyahu.
En declaraciones radiales, la embajadora expresó: «Estamos desilusionados con esta votación, pero las relaciones entre los países, como las relaciones entre los humanos, son más amplias y complicadas. Esperamos superar esta etapa».
A su entender, la postura argentina es cuestionable por lo «unilateral» y porque no advierte que la organización Hamas cometió «crímenes de guerra y comenzó» el enfrentamiento.
«Nosotros tratamos de bajar el fuego, evitar que haya conflicto. Hamas tenía un interés obvio porque cancelaron las elecciones en la autoridad palestina y comenzó el lanzamiento de misiles contra Israel», remarcó Ronen.
Interna en la comunidad judía
Por su parte, el titular de la DAIA, Jorge Knoblovits, volvió a dejar en evidencia su disconformidad tras el encuentro con el presidente Alberto Fernández y subrayó que le da «muchísima pena» que la Argentina haya votado en la ONU a favor de una investigación para determinar si Israel cometió crímenes de guerra contra la población palestina, ante lo cual consideró que el Consejo de Derechos Humanos del organismo «está devaluado».
El encuentro de Knoblovits con el mandatario, también reavivó la interna en la comunidad judía en el país, debido a que el ex presidente y actual miembro del consejo directivo del Llamamiento Argentino Judío, Jorge Elbaum, expresó sus diferencias con la DAIA.
«Es una vergüenza que una organización de la sociedad civil argentina fundada para luchar contra la discriminación y la judeofobia esté pidiendo una reunión con el jefe de Estado argentino para un tema de política exterior. Están muy confundidos todos», sostuvo Elbaum.
El dirigente señaló además, que «la DAIA es una representación de la embajada de Israel en la Argentina. Pero debería ser la embajada la que se queje, no la DAIA. Que Israel se queje porque no está de acuerdo con la posición argentina me parece aceptable aunque discrepo profundamente, pero es el estado de Israel, no la DAIA», agregó.
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