Vuelven al Aeroparque Jorge Newbery los vuelos regionales que habían derivado a Ezeiza
El ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, junto al Ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, anunciaron esta tarde el retorno desde el 11 de mayo de los vuelos desde y hacia países limítrofes al Aeroparque Jorge Newbery, luego de que desde abril del año pasado operaran en la estación aérea metropolitana sólo los servicios a Uruguay.
La decisión se fundamentó, entre otras razones, en la superpoblación de vuelos que se registra en determinadas horas en el aeropuerto internacional de Ezeiza, lo que provoca demoras en el proceso de ingreso al país.
Fuentes de Migraciones indicaron a la agencia de noticias Télam que el problema central radica en que entre las 8 y las 11 se acumulan vuelos internacionales y regionales, con un caudal de pasajeros que excede la capacidad actual del servicio migratorio, lo que deriva en largas colas, sobre todo en el caso de los extranjeros, donde el proceso suele ser un poco más lento que con los viajeros argentinos.
«El tema fue planteado muchas veces ante las autoridades de Transporte, porque todas las compañías regionales querían tener sus vuelos de manera concordante con el arribo de los vuelos de Europa o Estados Unidos, pero eso provocaba una saturación que era imposible de evacuar, aún cuando tuviésemos todos los puestos funcionando y aún cuando reforzáramos con puestos extras», indicaron.
La decisión de llevar todos los vuelos regionales a Ezeiza se tomó en 2017, mediante la resolución 183/2018 del 6 de julio de ese año, para «descomprimir» Aeroparque, y establecía que a partir del 8 de abril de 2018 el 50% de los vuelos debían trasladarse a Ezeiza.
Ese plazo luego se amplió al 3 de mayo debido a trabajos que se estaban realizando en la pista principal del aeropuerto, mientras que determinaba que para abril del 2019 el total de los vuelos ya debían operar en Ezeiza, quedando solamente en Aeroparque las operaciones con destino a Montevideo y Punta del Este.
El objetivo de la medida adoptada por el macrismo era «hacer espacio» en Aeroparque para que las low cost que su gobierno habilitó volar pudieran comenzar a operar desde allí.